El Ministerio de Defensa prevé ceder el uso de la antigua fábrica de armas a la Universidade da Coruña (UDC) para desarrollar el parque tecnológico. El secretario de Estado de Defensa, Ángel Olivares, ha anunciado que el departamento estatal estudia cómo decretar una concesión demanial a la institución educativa como contrato puente mientras se constituye el consorcio o la figura que gestionará la Ciudad de las TIC. En Pedralonga habrá cabida también para otras iniciativas, ya que el parque tecnológico no ocupará todo el espacio, apuntó Olivares en su anuncio, realizado ayer durante la visita junto a la ministra de Defensa, Margarita Robles, a Ferrol.

Fuentes próximas a la negociación aseguran que se prevé resolver la concesión en un mes. Olivares consideró que la "concesión puente" es "lo más razonable" para poder ceder el uso "mientras se constituye el órgano definitivo de gestión de ese terreno".

"Es lo que legalmente podemos hacer", aseguró el secretario de Estado sobre la solución de decretar una concesión demanial a una institución pública. Afirmó que el Ministerio estudia cómo efectuar ese contrato puente. En cuanto al ente que gestionará el proyecto de modo definitivo, Olivares apuntó que "como aquí están en principio implicados el Ayuntamiento la Universidad, la Diputación y seguramente también la Xunta, creemos que la figura lógica sería la constitución de un consorcio que uniera a estas instituciones" o "otra figura pública semejante que permitiera una concesión demanial directa".

El secretario de Estado incidió en que "esta solución es compatible con otras peticiones que se puedan realizar porque la fábrica de armas no ocupa todo el terreno, sino que existe más terreno que se podría destinar a otros usos". El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, prioriza la construcción de un hospital sobre la Ciudad de las TIC.

En cuanto a la iniciativa del parque tecnológico, consideró que es "un proyecto muy positivo para la ciudad". Afirmó que la iniciativa le fue trasladada por "las instituciones locales" y la Xunta en el momento en que se rescató la concesión anterior porque la empresa, Hércules de Armamento, "había incumplido" el contrato y "el Ministerio de Defensa estaba en condiciones de convocar un nuevo concurso para ver si existía industria de defensa interesada en continuar produciendo en esas instalaciones".