El Concello tiene la propiedad de la última parcela sin edificar del plan parcial de Os Rosales, aprobado hace casi tres décadas. La Concejalía de Rexeneración Urbana no ha determinado aún cuál será el destino del solar, ubicado en la calle Emilio González López y que aparece en el plan general aprobado en 2013 como de uso residencial. Por ahora, fuentes municipales condicionan la decisión al momento en que finalice la tramitación del estudio de detalle de un esqueleto ubicado en una parcela vecina, ya que las condiciones edificatorias que se establezcan para este regirán también un posible inmueble en el terreno municipal.

Desde el departamento apuntan que los dos solares son "gemelos" „están separados por una calle en dos sentidos con aparcamientos para coches„ y también recuerdan que la parcela privada tenía una licencia previa al actual plan general, por lo que de las consideraciones que se concluyan de este proceso dependerán, dicen, las posibilidades de la propiedad pública. Ambos solares están ubicados en la zona de la plaza Elíptica, en la calle Emilio González López, con un entorno de edificios similares entre sí. En la parte trasera de ambos terrenos se encuentra el Centro Municipal de Empleo y dos residencias de personas mayores.

En el documento presentado por los promotores privados al Concello, estos planteaban continuar la obra, paralizada desde 2011, completando el edificio hasta las ocho plantas, bajo cubierta y bajos comerciales, así como sótano con garaje.

Rexeneración Urbana analiza ahora el estudio de detalle, confirman desde la concejalía, tras declarar en febrero del año pasado caducada la licencia por la ausencia de actividad en la zona desde hacía siete años. La inmobiliaria alega en el documento que "una serie de circunstancias de índole fundamentalmente personal" impidieron que pudiera cumplir los plazos para finalizar la construcción y con la prórroga solicitada, después, al Ayuntamiento.

La primera licencia, otorgada en 2008 otorgaba un plazo de 36 meses, y la extensión de la duración del permiso llegó a los 24 meses. La empresa añade en el texto que el esqueleto estaba causando daños en los edificios cercanos.