Quizá fueron los nervios o la emoción del momento lo que ayer provocó al rector un llamativo lapsus temporal al inicio de la lectura del discurso en su acto de investidura. Julio Abalde, nacido hace 64 años, se atribuyó por un instante cien más. "Afronto un segundo mandato con la misma ilusión que en 1916", leyó, y continuó sin corregir. Como refleja el texto entregado a los medios, la fecha escrita era 2016.