El miedo a contraer el coronavirus y el estado de alarma decretado que por el Gobierno central que limita los desplazamientos han provocado una considerable bajada de los usuarios del autobús urbano coruñés, con una caída cercana al 85%, según los datos que maneja la concesionaria, la Compañía de Tranvías.

Este servicio inició hoy la reducción gradual de las frecuencias y mañana solo habrá disponible un 61% de las expediciones, de tal modo que el transporte funcionará como si fuese un día festivo o un domingo.

La empresa que presta el servcio afirma que “esta reducción no se escalará de manera automática a todas las líneas, sino que está trabajando en la adecuación de horarios y frecuencias en función de los datos de ocupación que se están analizando”, de manera que coincidan “al máximo con las necesidades de transporte de los usuarios”, sobre todo de aquellos que utilizan el autobús por motivos laborales. “Así, sólo el porcentaje de servicio será equiparable al de un domingo, pero no así el mapa de horarios y frecuencias, que se reforzará en las horas punta de entrada y salida del trabajo”, afirma la empresa.

La compañía explica que estará preparada hoy para actuar” en tiempo real y reforzar líneas o frecuencias en las que detectemos una ocupación incompatible con la protección adecuada contra el coronavirus”.