Ricardo García Mira es catedrático de Psicología Social en la Universidade da Coruña (UDC) y coordina el proyecto de investigación europeo Entrances, que analiza el impacto de la transición energética en diversas zonas europeas en las que se mine o trabaje con carbón. Entre ellas está As Pontes de García Rodríguez, cuya central térmica está previsto que cierre en 2022.

Esta semana celebran el congreso de inicio del proyecto, con un congreso en el que participan representantes del Gobierno y grupos de toda Europa.

En el proyecto participan catorce centros de investigación de doce países europeos. Presentamos el proyecto a una de las últimas convocatorias de la Comisión Europea, convocatoria del programa Horizonte2020, a la que concurren investigadores europeos y de otros países que aportan con una aportación al programa, como Israel o Corea del Sur. En nuestra convocatoria se presentaron 18 consorcios y el nuestro quedó entre los tres premiados. Lo desarrollaremos hasta el 30 de abril de 2023.

Reciben tres millones de financiación. ¿Cuál es el objetivo?

Analizar, explorar, qué aspectos sociales son importantes para definir políticas relativas a la transición energética, y realizar un informe con recomendaciones a nivel regional, nacional o europeo. Las ayudas al carbón terminaron en 2018, y esto ha significado procesos de despoblación, desempleo, emigración a otros lugares desde las áreas afectadas... Hay zonas de Europa que están viviendo esto, como As Pontes, que es el caso español que hemos puesto para estudiar. Como ventajas, tiene una posición estratégica privilegiada para contactar con Latinoamérica y el Corredor Atlántico, y tiene exenciones aduaneras. Se analizarán otras quince regiones en toda Europa.

Su campo es la psicología social; también participa González Laxe, economista, e investigadores en otras disciplinas.

Tenemos expertos en ciencia política, sociólogos, psicólogos, economistas... Vamos a hacer un análisis desde seis dimensiones, contemplando aspectos socioeconómicos, sociotécnicos, socioecológicos, socioculturales, sociopolíticos y sociopsicológicos. A estos se añade un séptimo, la dimensión de género. En e caso de Gales, tras la crisis minera se mostró que aparecían nichos de empleo relacionados con el trabajo femenino.

¿Qué aportarán, por ejemplo, los psicólogos?

La UDC tiene una amplia experiencia en psicología social de la sostenibilidad. Un proyecto de energías renovables tiene que crear suficiente sentimiento de pertenencia, algo que permita a la gente involucrarse, pensar: "Esta región, a partir de ahora, va a ser líder en energía renovable". También se estudia el apego al territorio, que influye en la manera en que la gente experimenta emigrar.

¿Cómo investigarán?

La idea es generar conocimiento a partir de la interacción con los grupos de interés: ayuntamientos, industrias, Endesa, sindicatos, grupos ecologistas... Se trata de no mirar solo los intereses de una parte, y conseguir una visión de futuro a través de la que se pueda canalizar la acción política para contribuir a que ese futuro sea posible.