Un grupo de cuatro delfines apareció nadando en O Parrote a última hora de la tarde de ayer, quizás atraídos por la buena tarde que hacía, como los paseantes, o por la presencia de calamares, como los pescadores que a esas horas tendían sus cañas hacia el mar en busca de una captura. En cualquier caso, los simpáticos mamíferos se convirtieron en la sensación del lugar, y tanto los caminantes que disfrutaban de las horas permitidas para recorrer el litoral como los pescadores (humanos) dejaron por un momento su actividad para admirar y grabar con sus móviles a los pescadores (cetáceos).