La segunda y última parte del proyecto de urbanización del parque ofimático, que ha cambiado su anterior denominación por la de Xuxán, fue presentada hace casi dos años, en el mandato anterior, pero todavía no hay fecha estimada para su licitación. El Concello ha visto además frenado el proceso por la necesidad de realizar unos cambios y ajustes técnicos en el proyecto a instancias del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, que, según fuentes municipales, son arreglos de poca envergadura que el área de Urbanismo remitirá en breve y de los que espera recibir una respuesta "rápida".
Para darle recorrido a la finalización de la urbanización en Xuxán, que tiene una inversión prevista de 14 millones de euros y 18 meses de ejecución, el proyecto necesitaba contar con el visto bueno de distintos organismos nacionales, dado que incluye conexiones con el barrio vecino de Matogrande, del que Xuxán está separado por las vías del tren que unen las estaciones de San Diego y San Cristóbal. El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) ha remitido al Concello un informe favorable respecto a la afección de la urbanización en sus terrenos en el ámbito, pero Transportes (antiguo Ministerio de Fomento) envió en febrero un informe desfavorable, por lo que el Concello debe hacer correcciones en el proyecto.
El departamento estatal apuntó en el documento que el plan no establecía medidas para "conseguir la efectividad de las servidumbres acústicas" en el ámbito de la urbanización, por lo que instaba al Concello a delimitar la zonificación acústica de la superficie de actuación con mapas de sonido y áreas de conflicto. Transportes también señaló que el proyecto no respetaba zonas de protección de carreteras estatales, ante lo cual Urbanismo tendrá que hacer "pequeños cambios" relacionados con las superficies previstas en viales y aceras en la zona de la avenida de Alfonso Molina y modificar la implantación de algunos servicios.
Cuando el Concello presentó la segunda fase de la urbanización en el ofimático poco antes de concluir la primera apuntó que al menos hasta 2020 no empezarían los trabajos. Hasta que no cuente con todos los informes favorables no podrá licitar el proyecto, un paso al que aún no pone fecha. El plan incluye la contención del desnivel a la altura del colegio Maristas y de los taludes que separan Xuxán de las vías del ferrocarril y la conexión viaria y peatonal entre el nuevo barrio y el de Matogrande a través de la calle Juan Díaz Porlier.
La urbanización comprende la instalación de 2.000 árboles y 35.000 metros cuadrados de césped y 7.000 de arbustos, 160 bancos y 16 fuentes, una gran pérgola de seis metros de ancho y un área de parque infantil; el plan suprime un aparcamiento subterráneo bajo la plaza central del ámbito.
La conexión con Matogrande no es la única que afecta a la continuación de la urbanización de Xuxán. Por una parte el Ayuntamiento prevé mejorar la comunicación con la zona de Eirís a través de nuevos trabajos en la rotonda de la calle Camilo José Cela junto al supermercado Lidl; por otro lado, en el otro extremo junto a Alfonso Molina hay una pasarela utilizada por peatones y ciclistas construida por la Empresa Municipal de Aguas de La Coruña (Emalcsa) sobre las canalizaciones del ofimático sobre las vías del tren cuyo uso analiza desde el año pasado Adif.
