El Concello ampliará el horario de apertura de los cementerios de la ciudad desde el 28 de octubre hasta el 1 de noviembre para facilitar que las familias puedan visitar a sus seres queridos fallecidos en los días previos a la festividad de Todos los Santos, cuando es tradición cambiar las flores de los nichos. Los cementerios abrirán sus puertas a las ocho de la mañana y las cerrarán a las siete de la tarde.

La alcaldesa, Inés Rey, anunció ayer que, si bien no se limitará el aforo de los cementerios al ser espacios abiertos, sí que habrá vigilancia para controlar que los asistentes usen correctamente la mascarilla y que mantengan la distancia de seguridad, para evitar el contagio de coronavirus, en esta segunda ola de avance de la infección. Además, se instalarán dispensadores de gel hidroalcohólico en puntos estratégicos, próximos a elementos comunes, como las regaderas y los pasamanos, y se habilitará cartelería informativa en los accesos.

La Concejalía de Medio Ambiente reforzará la presencia de contenedores de basura orgánica para que las personas que acudan a los cementerios puedan depositar los restos de flores y también habilitará más contenedores de material inorgánico para guantes y mascarillas, entre otros residuos. El Concello recuerda, de todos modos, que estas medidas pueden cambiar si la Xunta impone más restricciones en los próximos días en cuanto a la movilidad de la ciudadanía o al acceso de espacios abiertos, como es el caso de los camposantos del municipio.

Los cementerios abrirán desde el próximo miércoles a las ocho de la mañana y hasta el domingo y cerrarán sus puertas a las siete de la tarde, sin interrupción a la hora de la comida.