Miguel Ladrón de Guevara es un clásico de los escenarios de A Coruña y cada semana se podía disfrutar de su espectáculo y de su música en un establecimiento hostelero de la calle San Juan, pero "desde marzo" no ha podido "volver a cantar en un bar", según cuenta. Su rutina y su forma de subsistencia de los últimos seis años se ha roto y aún no sabe cuándo la podrá recuperar. "Me han salido muy poquitas cosas y relacionadas con la hostelería, ninguna. Se reducen los aforos y no los emplean en este tipo de actuaciones. Yo, con estos ingresos, comía y pagaba la hipoteca y ahora nada. Ha sido como una prejubilación forzosa", relata quien no pierde la esperanza de subirse de nuevo a un escenario para poder seguir disfrutando de su pasión y de su modo de vida.

Miguelón, como le conocen muchos habituales del mundo de la música en la ciudad, ha seguido participando en otro de sus proyectos con Hot Chocolates y se ha beneficiado de algunos de las actuaciones pactadas por la Rede Galega de Música ao Vivo con la Xunta con motivo del Xacobeo 2021 para dinamizar el sector de la cultura en estos momentos tan duros. "Di algunos conciertos con aforo reducido y uno sin nadie mientras nos grababan. Fue lo más raro que me pasó en mi vida", asegura aún sin creerse la situación vivida. El músico no pierde la ilusión por un regreso cercano y cree que "solo queda esperar a que escampe".