Los mariscadores de la ría de O Burgo podrán seguir faenando en el estuario, al menos hasta el mes de noviembre, si se cumplen los plazos que recoge el cronograma del proyecto de regeneración, que fue publicado ayer en el Boletín Oficial del Estado (BOE), y que prevé que las obras comiencen en diciembre. La Consellería do Mar mantiene su compromiso de suspender las concesiones de marisqueo en cuanto se inicien los trabajos y hasta el final de los mismos.

El plazo de ejecución máximo es de 26 meses, aunque las empresas podrán reducirlo. El precio del contrato es de 40,1 millones de euros sin impuestos, una cifra que sube hasta los 48,59 millones de euros con el IVA. Las obras cuentan con cofinanciación europea, hasta en un 80% de su importe total. Las empresas interesadas en presentar sus ofertas tendrán de plazo hasta el 2 de marzo, a las dos de la tarde, para hacerlo. La apertura de los sobres se realizará entre los meses de marzo y abril, para su valoración y adjudicación. El dragado de la ría llega así a su fase de licitación tras ocho años de trámites ambientales.

Queda ahora por dilucidar quién pagará las compensaciones económicas que los mariscadores solicitan al negársele la capacidad de faenar durante la ejecución de las obras. Los mariscadores solicitan a la Xunta y al Estado que resuelvan sus compensaciones con una reunión entre sus servicios jurídicos, ya que el ministerio defiende que debe ser el Gobierno gallego quien se haga cargo del plan social, por tener transferidas las competencias del marisqueo, y la Consellería do Mar dice que, como promotor de la obra, deben ser las arcas estatales quienes paguen estas ayudas. Los mariscadores solicitan aproximadamente 700.000 euros anuales para el colectivo, para paliar las pérdidas que les supondrá no poder faenar.

La conselleira do Mar, Rosa Quintana, recordó ayer, en declaraciones a Efe, que en enero de 2019 la Xunta propuso un plan social en el que participaran los Gobiernos autonómico y central, así como los ayuntamientos del contorno de la obra de dragado, y mantiene el compromiso de poner 100.000 euros para llegar al millón de euros en ayudas, además, plantea que sea el sector quien se encargue de las labores de retirada de los bivalvos que requiere el plan y también de su posterior resiembra, valoradas en más de 600.000 euros. Considera que, tras el dragado, se podrán recuperar los 2.000 empleos en marisqueo que daba la ría en los años ochenta.

El delegado del Gobierno, Javier Losada, aseguró ayer que 2021 será “sí o sí” el año del inicio de la regeneración de la ría de O Burgo.