El grupo municipal de Marea Atlántica expresa su preocupación por que el complejo deportivo de La Solana pueda quedar en manos del Puerto, según propone la propuesta de protocolo que contiene el plan de reordenación de los muelles elaborado por la Universidade da Coruña por encargo del Gobierno local, por lo que exige a la alcaldesa, Inés Rey, que se desmarque de esa iniciativa y cumpla con el acuerdo plenario de enero de 2020 que “blinda la naturaleza pública de los terrenos”.

La portavoz de Marea, María García, recuerda además que el mantenimiento de la titularidad pública de La Solana forma parte del acuerdo de mandato de su grupo con el PSOE. Añade que cuando gobernaba Marea se inició la modificación en el plan general para cambiar de privado a público el suelo sobre el que se asienta en complejo deportivo después del “cambiazo” realizado en el mandato del PP, proceso que culminó con la aprobación definitiva del cambio el año pasado en la etapa socialista de gobierno.

“La propuesta de la UDC calca lo que Feijóo proponía en el protocolo de 2018, con el agravante de que hoy esto es perjudicial para la ciudad y contrario a un acuerdo plenario firme y a las obligaciones asumidas por el Concello con la modificación del plan general. Seguir el criterio de Universidad supondría un segundo cambiazo. Por eso, Inés Rey debe ser contundente y desmarcarse”, señala la portavoz de Marea Atlántica.

La propuesta de protocolo señalada por el informe estratégico de la UDC apunta la posibilidad de que entre los compromisos que debe adquirir cada administración participante en un posible acuerdo figura que la Autoridad Portuaria mantenga “los terrenos de La Solana como patrimoniales” y con “idénticos fines a los actuales”.

El recinto está alquilado a la sociedad Metropolitan hasta el año 2027 y el Gobierno local culminó en enero de 2020 la modificación del plan general que había iniciado el Ejecutivo de Marea para devolver a ese suelo el carácter de dotacional público, ya que durante el mandato del popular Carlos Negreira se cambió a privado.

La expropiación sería, según el informe jurídico que avala el cambio urbanístico, la opción preferente para que el Concello se hiciera con La Solana, aunque también admite que se haga “por mutuo acuerdo o convenio”. El concejal de Urbanismo, Juan Díaz Villoslada, declaró hace un año, cuando se aprobó la modificación, que no había un “planteamiento expropiatorio”.