Dar vida a personajes ilustres es el último pasatiempo de las redes sociales. Se hace a través de una aplicación que es capaz de dotar de vida a retratos de celebridades, muertas o vivas, y también anónimos. Han aparecido muchos en clave gallega y coruñesa en los últimos días. Emilia Pardo Bazán, por ejemplo, y hasta uno de los hermanos García Naveira. Uno de los más sorprendentes lo colgó en Twitter el Hematocrítico: se trata del famoso retrato de Francisco Vázquez, que pende de las pareces del Palacio Municipal. Gracias a la tecnología, se mueve y sonríe como si se tratase de uno de los cuadros de la escuela Hogwarts de Harry Potter pero con ornamentado estilo embajatorial.