Empezó con su taxi en septiembre de 2019 y solo unos meses después vino el vendaval. Pero Conchi Prieto es de esas personas que nunca se rinde. Y no piensa quedarse en casa. “Prefiero hacer diez euros que quedarme sin nada. Siempre digo que si no sales a la calle, el dinero no te lo traen a casa”, proclama. Un lema que le ha ayudado a levantarse cada mañana durante la pandemia para hacer su trabajo. “Tengo la suerte de tener clientes habituales y les tengo que dar las gracias porque de alguna manera son ellos los que me mantienen aquí”, declara.

La vida ahora es como una montaña rusa, pero tampoco eso la atormenta. “Todavía hay mucho que recuperar. No se ha vuelto a los números de antes, ni de lejos. Pero hay que tomárselo con paciencia”, reflexiona, a la vez que revela que, de noche, cuando llega a casa, piensa: “Estoy bien, no tengo fiebre y no me duele nada. Hay que seguir”.

Dentro del taxi le tocó “ser de todo”, además de conductora. “La gente mayor buscaba mucha atención. Me tocaba hacer de psicológica porque salían de la calle y tenían mucho miedo”, dice Prieto, que antes de ser taxista trabajó “como auxiliar a domicilio y administrativa”. “Hay que aguantar, ya vendrán tiempos mejores”, comenta, con positivismo.

Ante esa imagen fuerte y de lucha constante para vencer los obstáculos, Conchi Prieto asegura que los comienzos no fueron fáciles. También ella temió al coronavirus. “¿Quién no tuvo miedo? Pero hay que seguir trabajando. Yo tengo a mi madre, que es mayor, pero creo que no se puede ir con miedo por la vida porque entonces no haces nada”, resume.

Para hacer desaparecer esos fantasmas, la taxista optó por “tomar todas las precauciones posibles”, así que instaló una mampara de policarbonato en su vehículo cuando todo estaba empezando. “Vas viendo el día a día, pero protegerse lo máximo posible es muy importante”, señala esta mujer, que es de las que piensa que “mañana puede cambiar la situación”. “Es lo que nos toca vivir”, apunta Prieto, que se “adapta muy bien a las situaciones”. “Si tengo un bajón, ya mejorará. No me preocupa”, manifiesta.