Rosa María Salamanca | Joyería Salamanca

“Tenemos la Marina y el puerto y eso no se lo pueden llevar”

“Las firmas emblemáticas no quieren estar en un local que sea como un agujerito”

Rosa María Salamanca, en la joyería. |   // CARLOS PARDELLAS

Rosa María Salamanca, en la joyería. | // CARLOS PARDELLAS / g.M.o.

Son uno de los negocios más antiguos de la calle Real...

Llevamos ochenta años, siempre en este bajo, creo que antiguamente también había una joyería aquí. La fundó mi padre, en el año 1940.

¿Y antes ya trabajaban en el sector de la joyería?.

Sí, pero en otro lugar, porque eran castellanos, así que, la generación de mis hijos es la cuarta. Si vas por otras ciudades de España verás este mismo letrero de la joyería Salamanca, que son mis primos.

¿Y cómo cambió la calle Real en todos estos años que llevan trabajando en ella?

Antes lo que había, sobre todo, eran zapaterías de calidad y joyerías, que daban mucho prestigio. Tenía mucho ambiente, después ya fue decayendo el comercio. Se unió que no había locales emblemáticos. El Ayuntamiento conservó las casas, que hay fachadas muy bonitas, pero los bajos casi casi me parecen nichos. Eso no atrae ni para poner un comercio bonito ni para el turista. Las firmas emblemáticas no quieren estar en un agujerito.

Y después fue cambiando y vinieron franquicias y otros tipos de comercios...

Vinieron, pero algunas se fueron porque les gustaban más otros entornos. De todos modos, hay que decirles que aquí tenemos la Marina y tenemos el puerto y eso no lo pueden llevar para otro lado.

¿Y cambiaron mucho el local en estos ochenta años?

No, está sin tocar. Antes se hacían muchos comercios así, en el portal de las viviendas. [comparten entrada con una peluquería]. Había otros locales bonitos, como el de Vogue, el de Malde y el de Ataulfo.

¿Y la clientela también cambia con el paso de los años?

Si atiendes bien a los clientes, tienes a una generación, a la otra y a la otra y, si Dios quiere, la otra. Tenemos muchas anécdotas, de bodas, bautizos, comuniones...

¿Y el precio de los bajos no ayuda a instalarse aquí, no?

Eso era antes, ahora todo el mundo se amolda porque las cosas han ido para abajo para todos y hubo firmas que atraían a muchos clientes que decidieron irse, como Zara, que se fue a la plaza de Lugo.