Circular en un vehículo no autorizado por el Paseo de O Parrote, a lo largo de los apenas 350 metros que van desde el hotel Finisterre hasta el cruce que separa el jardín de San Carlos del hospital Abente y Lago, es en lo que va de año la infracción más penalizada por la Policía Local en su labor de vigilancia de las condiciones de peatonalización en la zona, la Ciudad Vieja. Desde hace casi dos años los vehículos, salvo los permitidos, no pueden circular por ahí, pero entre el 1 de enero y el 25 de mayo pasado los agentes tramitaron 762 de las 915 denuncias impuestas por la invasión del espacio peatonal. Es un porcentaje superior al 83% que equivale a 5,2 multas al día.

El dato, del que el Gobierno local informó al grupo municipal del PP en la respuesta a una pregunta escrita del último pleno, se completa con una lista de las infracciones más frecuentes por circular sin autorización por el casco histórico. Muy por detrás del tránsito no permitido por el Paseo de O Parrote está la circulación por la calle Maestranza (55 denuncias) y la calle San Francisco (45) y el uso del aparcamiento del Oceanográfico (34).

El que acceder al Paseo de O Parrote fuese la infracción más frecuente en los últimos meses puede deberse a que los conductores que no conocen la regulación del tráfico en la zona accediesen a ese tramo desde el Abente y Lago y, al percatarse de la maniobra no permitida, efectuasen un cambio de sentido a la altura del hotel Finisterre, ya que fueron muy pocas las multas por continuar por esa vía en el Paseo de la Dársena, solo dos.

También fueron penalizados en proporciones más bajas los conductores que circularon indebidamente por Puerta de Aires, Campo de la Estrada, Damas, Herrerías, Santa María, Tabernas, Santiago, Plaza de Azcárraga, Plaza de María Pita y Paseo de la Dársena. Fueron un total de 915 denuncias, 6,3 al día. La mayoría de las infracciones, 549, se produjeron en el turno en el que la Policía Local controla por las mañanas la peatonalización de la Ciudad Vieja. En el turno de tarde hubo 348 denuncias y en el de noche fueron muy pocas, 18.

La prohibición del paso de vehículos afecta al espacio que está rodeado por la plaza de María Pita con la fachada posterior a la calle Capitán Troncoso y la plaza de los Ángeles, María Barbeito, Paseo de la Dársena, Paseo de O Parrote, Paseo del General Sir John Moore, calle San Francisco, Maestranza, Campo da Estrada y General Alesón. A esta zona solo pueden acceder con sus coches los residentes, trabajadores y propietarios de plazas de garaje en la Ciudad Vieja. Desde el 25 de junio de 2019 no hay cámaras ni bolardos para impedir el acceso de coches no autorizados.

El Concello prevé instalar cámaras para controlar los accesos al casco histórico, según informó también el Gobierno local al PP, mediante la instalación de cámaras colocadas en los semáforos de la zona. La medida responde a las quejas de vecinos y comerciantes, que aseguran que, aunque han pasado casi dos años desde el veto a los vehículos, no se cumplen las condiciones de la peatonalización.