El Tribunal Administrativo de Contratación Pública de Galicia (TacGal) ha desestimado los dos recursos presentados contra la adjudicación a la unión de empresas Pinearq-Vázquez Muíño-Monteoliva de la redacción del proyecto para la ampliación de las instalaciones del Complexo Hospitalario Universitario A Coruña (Chuac).

El TacGal suspendió de forma cautelar la adjudicación del diseño para la ampliación del hospital el pasado 13 de agosto por los recursos presentadas por las empresas aspirantes que fueron excluidas del concurso al considerar la Xunta que no acreditaron “suficientemente” la reducción de presupuesto que planteaban.

Finalmente, Contratación ha desestimado estos recursos porque las UTE Abalo Arquitectura e Ingeniería, Intecsainarsa-Arcidc International Design Consultants y Gisgestión integral del suelo y Arquitectos Ingenieros Chuac no han justificado en algunos casos la reducción del presupuesto que planteaban, haciendo que no sea viable, y en sus documentos se encontraron “incoherencias” que no fueron resueltas por los licitadores, relacionadas con el gasto en personal o la instalación de una oficina específica para desarrollar el proyecto.

Además, el TacGal aprecia que, siguiendo la ley, el órgano licitador permitió a las aspirantes explicar los elementos de su oferta tras evaluarlas y considerarlas “desproporcionadas”.

La adjudicación se resolvió a principios de agosto a favor de la unión de Pinearq-Vázquez Muíño-Monteoliva por un precio superior a los seis millones de euros con IVA. La unión temporal de empresas formada por Abalo Arquitectura e Ingeniería, Intecsainarsa-Arcidc International Design Consultants y Gisgestión integral del suelo fue excluida del procedimiento por presentar un presupuesto demasiado bajo para las tareas encomendadas. Otra de las candidatas excluidas del proceso de selección, la encabezada por Díaz y Díaz recurrió también la adjudicación del contrato.

Cuando el TacGal informó de la suspensión cautelar de la adjudicación de los proyectos del nuevo hospital, fuentes de la Xunta indicaron que si el tribunal fallase en el plazo señalado (15 días), esto no afectaría a los tiempos de la obra, en este punto de redacción del proyecto, por lo que no se acumulan retrasos. La decisión puede ser recurrida en el plazo de dos meses ante la sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia.