La Valedora do Pobo ha instado a la Xunta a cubrir la plaza de profesor de Primaria que permanece vacía en el colegio Ramón de la Sagra tras recibir las quejas de varios familiares de alumnos. En el catálogo que regula la dotación de profesores, elaborado por el propio Gobierno gallego, figura que el centro debe tener once docentes de Educación Primaria, pero solo se han cubierto una decena de puestos. Esta carencia supone que 25 alumnos del primer curso de Primaria, de unos seis años de edad, queden sin tutor, según denunciaron reiteradamente padres y docentes.
La Xunta ya había respondido negativamente a anteriores peticiones del centro, y el mes pasado la comunidad educativa presentó una reclamación ante el Gobierno gallego para que la plaza se cubriese, sin éxito. El Gobierno gallego indicó en ese momento a este diario que el Ramón de la Sagra contaba “con el personal docente necesario para atender al alumnado matriculado”.
Es la misma argumentación que empleó en un informe remitido a la Valedora do Pobo, a petición de esta. La Xunta argumenta que, sumando a los profesores de Educación Primaria los de todas las especialidades, como música o educación física el Ramón de la Sagra tiene, en este curso, un docente por encima de los 28 que figuran en el catálogo, y 29,5 en el primer trimestre (el decimal se debe a que parte de las plazas son a media jornada). En base a esto, la Xunta señala que hay horas libres en inglés y en música, y que la dirección podría aprovechar esta circunstancia para cubrir las horas de tutoría a los niños sin necesidad de enviar a otro profesor al centro.
Sin embargo, la Valedora indica que la realización de tutorías, “no está contemplada” entre las tareas que se pueden asignar al profesorado que tenga disponibilidad horaria en este caso. Así, insta a la Xunta a realizar “la provisión de todas las plazas de maestro de Educación Primaria previstas en el catálogo” y a que se garantice la tutoría para los niños siguiendo las normas prescritas.
La comunidad educativa del Ramón de la Sagra ya se ha movilizado en varias ocasiones para reclamar la plaza de profesor que falta y la solución a otras deficiencias. El pasado 29 de septiembre la fachada del colegio se cubrió de globos contra los recortes en educación, así como las de los centros coruñeses Labaca, Emilia Pardo Bazán y Sanjurjo de Carricarte y Ramón de la Sagra, los cullerenses Ría do Burgo y Vila de Rutis y el Valle Inclán, de Oleiros.
La plataforma Dereitos Non Parches, formada por asociaciones de familiares de alumnos, se manifiesta hoy a las 11.00 horas en la plaza Luis Seoane, ante la Xunta, para protestar por la falta de personal en centros educativos. Señalan que, además de en el Ramón de la Sagra, falta un docente de Primaria en el Sanjurjo de Carricarte, un profesor de educación física en el Emilia Pardo Bazán y otro de música en el centro Sagrada Familia. El Labaca carece de un trabajador formado en pedagogía terapéutica, y otros centros de la comarca también echan en falta especialistas en alumnado con necesidades especiales, al que la infradotación “afecta especialmente”.
Apoyo del BNG y el Concello
La situación del Ramón de la Sagra ha causado una reacción política. La alcaldesa, Inés Rey, reclamó el pasado martes a la Xunta que cubra las plazas de docentes que se encuentran vacías en colegios coruñeses y le pidió al Gobierno gallego una “mayor implicación” en los centros de la ciudad, dotándolos de “los medios humanos necesarios”.
El BNG llevó el asunto del Ramón de la Sagra al Parlamento gallego, solicitando a la Xunta la designación de un docente a través de una proposición no de ley,
