El director general de Telecomunicaciones y Ordenación de los Servicios de Comunicación Audiovisual del Gobierno de España, Arturo Azcorra, participó ayer en la sesión inaugural de las Jornadas de Ingeniería Telemática que organiza el Centro de Investigación TIC (Citic) de la Universidade da Coruña. Habla sobre el despliegue del 5G, los retos de la digitalización y la importancia de la ciberseguridad.
¿Cómo está siendo el avance del 5G?
España, en el despliegue de infraestructuras digitales, es uno de los países más avanzados del mundo, tanto en fibra como en despliegue del 5G. Lo que queremos es continuar siendo líderes y que seamos, además, de los primeros países del mundo en el aprovechamiento de la tecnología. No solo desplegarla, sino que tengamos multitud de empresas que utilicen esas nuevas posibilidades para transformar digitalmente su sector de actividad. Con el plan que tenemos en el Ministerio, la Estrategia de Impulso de la Tecnología 5G, en el que vamos a invertir 2.000 millones de euros, lo que queremos es ser un país puntero a nivel mundial.
¿Cómo es esa carrera mundial? ¿Dónde se va a colocar España?
La carrera es complicada porque es un sector muy competitivo y, a nivel mundial, hay grandes intereses en juego. España, en cuanto a despliegue, fue uno de los primeros países del mundo donde se instaló la tecnología 5G, todavía con una cobertura muy modesta. Pero ahora que hemos ordenado la banda de 700 megahercios y en breve vamos a publicar la reordenación de la banda de 3,5 gigahercios, con las inversiones que vamos a hacer y las distintas reformas para facilitar el despliegue, vamos a ser, sin ninguna duda, uno de los países del mundo con una mayor capacidad para desarrollo de servicios sobre 5G.
¿Cuáles son los retos actuales de la digitalización?
Son muchos, pero en la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones, que nos centramos en las telecomunicaciones e infraestructuras digitales, tenemos tres grandes planes de actuación. Uno es el plan para la conectividad, que lo que busca es proporcionar conectividad fija a todos los ciudadanos de España con 100 megabits por segundo bidireccionales hasta 2025. Este es un compromiso que la vicepresidenta Nadia Calviño ha reiterado y con el que vamos a garantizar que cualquier persona o pequeño negocio o actividad industrial tengan esa conectividad estén donde estén ubicados dentro de España. El segundo gran plan es la Estrategia de Impulso de la Tecnología 5G, con la que buscamos, como dije, ser el país con la mayor penetración y cobertura de 5G a nivel mundial. Para ello, contaremos con ayudas económicas para el despliegue de estos servicios. Para que lleguemos no solo en municipios de más de 20.000 habitantes, sino atacar municipios de menos de 10.000 habitantes. Y, por último, está el plan España hub audiovisual de Europa, para promover el desarrollo de una industria de contenidos audiovisuales en España, muy basado y orientado a tecnologías como posproducción, realidad virtual o realidad aumentada, sin descuidar el sector tradicional, en el que tenemos magníficos exteriores, cámaras, vestuario, peluquerías... Todos los servicios necesarios para producción audiovisual.
¿Cuál es la situación en Galicia? Hay zonas rurales sin esa conectividad.
Los planes de conectividad y de estrategia 5G van a lanzar un conjunto de programas que hemos agrupado bajo el paraguas que denominamos Unico, es decir, Universalización de las Infraestructuras Digitales para la Cohesión. Lo que buscamos es que se universalice el acceso a las infraestructuras digitales para mejorar la cohesión territorial. Las tecnologías de información son un elemento de integración territorial excelente. El mundo rural ha tenido, en las últimas décadas, una mejora enorme de su situación comparada con las ciudades gracias a las telecomunicaciones. Han podido estar en contacto con el mundo a través de noticias, de comunicarse con familiares o clientes. Lo que buscamos es continuar utilizando las telecomunicaciones para profundizar en esa cohesión. En A Coruña, en concreto, hemos invertido en los últimos años 38 millones de euros que han permitido tener banda ancha de alta capacidad a 140.000 unidades inmobiliarias más. En la última convocatoria, A Coruña recibe 3,5 millones que van a permitir incorporar 4.000 unidades inmobiliarias. Cada vez, la diferencia entre la inversión y el número de unidades inmobiliarias incrementadas es mayor, porque las que van quedando son más costosas, pero estamos dispuestos a afrontar ese reto. Vamos a garantizar que toda la población tenga 100 megas de banda ancha en el 2025.
El avance de las telecomunicaciones, ¿cómo influye en la recuperación económica?
Por un lado, en la propia inversión. Los 250 millones que hemos inyectado van a traccionar la economía, se van a contratar servicios, transportes, hostelería... Ese primer efecto positivo derivado de la pura inversión, de inyectar fondos en la economía, gracias al compromiso de la Unión Europea. Pero es mucho más importante el efecto transformador. Es el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. Se persiguen los tres objetivos. Primero recuperar a corto plazo, inyectar dinero en la economía. Estos esfuerzos buscan transformar una economía basada en el ciberespacio y la telemática. Tenemos que tener una economía mucho más ágil, moderna e innovadora. Aprovechando el potencial de esta transformación digital se crean nuevos modelos de negocio o modelos de negocio más competitivos. Esa transformación va a permitir que nuestra economía sea más resiliente frente a futuras crisis. Necesitamos una economía basada en sectores de alto valor añadido, tenemos un estado de bienestar que hay que mantener y eso no lo puedes mantener con empleos de bajo valor añadido, y robusta frente a crisis, con una demanda rígida.
Los ciberataques son una amenaza, ¿cómo se refuerza la ciberseguridad?
España es uno de los países más seguros del mundo, tenemos unos ratios de criminalidad muy bajos, y es también uno de los países más ciberseguros del mundo. Por nuestra Ley de telecomunicaciones, es obligatorio reportar todos los incidentes cibernéticos. No en todos los países es así. Hay una excelente colaboración entre las autoridades públicas y los sectores privados. Podemos decir que España es uno de los países más ciberseguros del mundo, pero no podemos confiarnos. El mundo ciber se mueve muy rápido y avanza muchísimo, así que hay que estar permanentemente alerta. En la medida que la economía y la actividad se mueva al ciberespacio, la seguridad en el ciberespacio cobra una mayor importancia respecto a la seguridad física tradicional, que sigue siendo necesaria. Nos pueden sustraer nuestro dinero, cifrarnos nuestros datos y pedir un rescate o pueden hacer daños sustanciales a nuestra economía.
