Fotograma a fotograma, la bobina rueda lenta en el CGAI. El conselleiro de Cultura, Educación e Universidade, Román Rodríguez, aseguró el pasado mes de marzo en su visita al Centro Galego das Artes e da Imaxe, ahora Filmoteca de Galicia, con motivo de la celebración de su trigésimo aniversario que, en cuanto se cambiasen los estatutos de la Axencia Galega de Industrias Culturais (Agadic), la Xunta sacaría a concurso la plaza de director del centro, vacante desde la jubilación del último responsable, Guillermo Escrigas, en verano de 2019. Ese condicionante burocrático, alegado por el conselleiro, fue solventado en abril y, con el camino despejado y seis meses después, el organismo autonómico evita poner fecha al inicio de los trámites que desemboquen en la elección del sustituto de Escrigas. “El objetivo es cubrir ese puesto lo antes posible, pero siguiendo los procedimientos necesarios para sacar la plaza a concurso”, apuntaron fuentes de la consellería de Cultura. La Xunta incide, además, en que “el puesto de director da Filmoteca de Galicia está provisionalmente asumido por el director del Agadic [Jacobo Sutil]”, con despacho en Santiago, “lo que garantiza su normal funcionamiento”, a pesar de la interinidad.

Es un retraso más en los planes de Cultura que el pasado febrero, ante preguntas de este periódico, aseguraba que su objetivo era cubrir “el puesto en las próximas semanas”. Una intención verbalizada, unas semanas después, por Román Rodríguez en el propio CGAI, pero de momento sin refrendo en el DOG.

En 2019, tras el adiós de Escrigas, el director xeral da Función Pública, José María Barreiro Díaz, firmaba un documento en el que formulaba unas “adaptaciones en la estructura orgánica de Agadic”, entre las que proponía la creación de “un nuevo departamento de Coordinación Xeral e Xerencia” y para financiar esta nueva unidad, con sede en Santiago, proponía, entre otras medidas, “suprimir la dotación económica existente de Director de la filmoteca, unidad que se adscribe al Departamento de Política Audiovisual”, según relataba el escrito del mes de diciembre de ese año. A pesar de este marco legal, Cultura ha reafirmado en varias ocasiones su intención de seguir adelante y que el nuevo director esté “en A Coruña”, un mensaje que repite lo apuntado en 2020 por director del Agadic, Jacobo Sutil, a este diario. La Xunta aseguraba hace meses que el puesto de director del CGAI “sí que está incluido en la RPT” (relación de puestos de trabajo) que hace pública la administración cada año.

Para los trabajadores del CGAI, los dos años de interinidad son un episodio más en la pérdida de peso específico del organismo, encargado de salvaguardar y difundir el patrimonio audiovisual gallego, tras años de disminución en sus presupuestos, de descentralización de su programación y de reducción de puestos de trabajo. La Filmoteca de Galicia llegó a contar con 14 empleados en sus dependencias y ahora mismo son ocho y sin bibliotecario, según fuentes de la entidad, y uno de ellos es una jefa de sección renovada en su comisión de servicios. En años del bipartito en la Xunta, entre 2006 y 2009, llegó a tener entre 500.000 y 520.000 euros de presupuesto y, después de ejercicios de bajada en la partida, en 2021 se queda en 155.000 tras los 132.000 de 2020. Para 2022 se repiten los 155.000 a la espera de que se aclare si dispondrá de nuevo director y estará en A Coruña.