Poner fechas al desarrollo de una gran infraestructura es tarea compleja. Atreverse a dar plazos pocas veces es garantía. Suele haber factores difíciles de manejar que siempre alteran las previsiones sobre la redacción, licitación, adjudicación y ejecución de un proyecto. La estación intermodal de A Coruña es uno de estos casos. En abril pasado el Diario Oficial de la Unión Europea (DOUE) anunció que el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) abriría la licitación de la remodelación de la estación del ferrocarril de San Cristóbal el 31 de diciembre de este año. No es esta la primera estimación temporal de una actuación que compete al Estado en el proyecto colectivo de la intermodal y, como las anteriores, vuelve a ser desatinada. Porque Adif, en respuesta a una pregunta de este periódico, informa de que la nueva planificación de la licitación de las obras sitúa esta parte del proceso “en el primer trimestre de 2022”.

El administrador ferroviario señala que las previsiones publicadas en el DOUE hace ocho meses “son informativas, no vinculantes” y completa la respuesta a la consulta indicando que en estos momentos la reforma de la terminal de San Cristóbal que deberá ejecutar se encuentra “en fase de supervisión interna y por parte de otras administraciones de forma previa a la licitación de las obras”. Dado que es posible que haya que realizar adaptaciones del proyecto “como resultado de este proceso de supervisión”, Adif formula una planificación distinta y sitúa el arranque del concurso en los primeros tres meses del próximo año.

Este nuevo calendario añade más tiempo a la contratación de la intermodal, ya que al tratarse de una infraestructura de gran calibre, la adjudicación de las obras no podrá producirse antes de al menos seis meses. En el mejor de los casos las obras comenzarían a finales del próximo año y, de acuerdo con el plazo estimado para su realización, 28 meses, la nueva terminal entraría en servicio a mediados o finales de 2025.

En junio de 2019, la Delegación del Gobierno había informado de que la estación iba a licitarse en aquel momento. El cálculo falló y un año más tarde Adif pospuso la licitación hasta 2021 por la necesidad de adaptar el proyecto a las nuevas exigencias del Código Técnico de la Edificación, trabajo que adjudicó el pasado enero y que debería estar concluido antes de iniciar la licitación, que, al contrario que las previsiones de abril anunciadas por el DOUE, no tendrá lugar este mes de diciembre.

Estado, Xunta y Ayuntamiento, que en mayo pasado firmaron el convenio marco de colaboración, reúnen fondos para hacer realidad la estación intermodal coruñesa, un intercomunicador de transporte concebido a finales de la primera década del siglo XXI para el que ha habido más de un diseño, muchas reuniones entre administraciones con partidos distintos en el poder, partidas presupuestarias consignadas, proyectos en diferentes fases, pero ninguna obra material ejecutada.

Adif demora de nuevo el concurso para reformar la estación de tren, al primer trimestre de 2022

La parte que compete a Adif afecta por un lado a la terminal, que debe reformarse con un coste total que se acerca a los 50 millones de euros, de los que 8,5 figuran para el próximo año en los presupuestos del Estado. El órgano central también debe encargarse de la pasarela peatonal y ciclista que conecte las avenidas del Ferrocarril y A Sardiñeira, pero respecto a este apartado de la obra hace tres meses que licitó aún la redacción de los proyectos básico y de construcción y el análisis de su viabilidad técnica y económica, trabajos para los que tiene un plazo de 21 meses.

Aunque Adif no ha licitado todas las obras que le competen, ya ha difundido, a través de un vídeo para promocionar a la skater olímpica coruñesa Julia Benedetti antes de los Juegos de Tokio, una recreación virtual de la intermodal en la que se ven la pasarela que une la estación de tren con la de autobús, una cubierta sobre las vías, una amplia terminal de pasajeros y una zona de ocio con cafetería y supermercado.

Buses y accesos

La Xunta, por su parte, es la encargada de la construcción de la estación de autobuses, que sustituirá a la de la calle Caballeros, y que tendrá además un aparcamiento subterráneo de 325 plazas que se costeará entre el Concello y Adif. Presupuestada inicialmente en 17,4 millones, su previsión es que esté en obras en 2022 y en funcionamiento en 2023, aunque su desarrollo se puede ver alterado por las zonas comunes que comparta con la terminal ferroviaria, para las que son necesarios convenios específicos. La Consellería de Infraestruturas tiene casi listo el proyecto constructivo y tras su aprobación licitará los trabajos; en las consignaciones presupuestarias hasta 2025 la suma de las partidas anuales, con cuatro millones para 2022, se elevan en cambio a los casi 40 millones.

El Concello tendrá que encargarse de las obras de los accesos a la intermodal, como la remodelación de las avenidas de A Sardiñeira y del Ferrocarril y la conexión entre las avenidas de A Sardiñeira y de Arteixo. Otra responsabilidad, ya en tramitación desde hace meses, es realizar y aprobar los cambios del plan general necesarios para poner en marcha estos proyectos. La Xunta y el Estado han reservado partidas en sus presupuestos para las competencias que tienen en la construcción de la intermodal coruñesa. El Ayuntamiento negocia las cuentas de 2022 con el grupo de Marea Atlántica y no ha avanzado si alguna de las inversiones previstas está relacionada con la futura estación.