La Opinión de A Coruña

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Reyes y guerra: las primeras noticias sobre A Coruña

La Universidade ha catalogado y digitalizado 12.000 ejemplares de publicaciones preperiodísticas, entre ellas ataques contra la ciudad

Crónica de las exequias por Margarita de Austria, en 1612. | // L. O.

Se dice que el primer texto que produjo Gutenberg en su famosa imprenta, la primera de Europa, fue un poema, y en 1455 sacó la Biblia que revolucionaría el modo de concebir la religión en Europa. Pero, pronto, este nuevo mecanismo sirvió para imprimir hojas con noticias, según explica la profesora de Literatura de la Universidade da Coruña (UDC) María Nieves Pena Sueiro.

“Los grandes poderes, el Estado, la Iglesia, ven la posibilidad de difundir ideas y usar la imprenta como vehículo propagandístico” y la población, en especial los burgueses de las grandes ciudades, “ven cada vez más la importancia de estar informado”. A lo largo de la Edad Moderna se publican por miles hojas de noticias, antecesoras del periódico, muchas veces con un solo número. Un grupo creado en la Universidade en 1994 ha catalogado y digitalizado cerca de 12.000 ejemplares, incluidas las primeras noticias sobre A Coruña.

Noticia sobre la salida de Felipe II desde A Coruña a Inglaterra. | // L. O. Enrique Carballo

Según explica Pena, miembro del proyecto y comisaria de la exposición Noticias verdaderas, extraordinarios prodigios, que está actualmente en la Biblioteca Nacional, el proyecto nació en 1994 de manos de la catedrática de la Universidade da Coruña Sagrario López Poza, que vio que podía haber “un filón” para el estudio, y empezó a colaborar con Nieves Rodríguez Brisaboa, de Informática. Actualmente “somos 18, ocho en la UDC”, y el equipo es multidisciplinar: “Hay gente de Filología Española, Italiana y Clásica, Historia, Historia del Periodismo, Historia del Arte, informáticos y un lingüista”. Desde 2001 el catálogo está en línea y se puede consultar en bidiso.es/CBDRS.

En él predominan las noticias españolas, pero este las relaciones de sucesos fueron un formato “paneuropeo”, explica Pena. “Donde más hubo fue en Alemania, inventora de la imprenta. Allí hay más dinero, también entonces: empezaron mucho antes e incluían grabados espectaculares”. En un principio “la publicación es ocasional”, y se publicaba una hoja “cuando surgía una noticia o interesaba contarla”. Con el tiempo empiezan a hacerse series, y en Flandes o Alemania “hay ya periódicos en 1605”. En España, pese a que hubo intentos anteriores y que algunas de Barcelona, Sevilla o Madrid se dedicaban a las noticias, “no hay prensa como tal hasta finales del siglo XVII”.

Relación sobre el ataque francés a la ciudad en 1639. | // L. O.

Entre las primeras noticias “lo que más abundan son las histórico-políticas” explica la investigadora, como las narraciones de guerras. Ya entonces contadas de manera propagandística: “las derrotas son siempre de los enemigos”. Pero también eran frecuentes las noticias “de sociedad”, ligadas a la nobleza o a la realeza. Las hay muy ricas en detalles, pues algunas veces las acompañaban grabados, y otras, cual en una crónica de gala actual, “dan detalles de la indumentaria” de los asistentes a los eventos.

A esto se suman noticias de sucesos, un apartado “más sensacionalista”, que van desde bandoleros a castigos a corruptos, “violencia de género”, terremotos y volcanes. También milagros y apariciones de monstruos, a veces niños deformes, otros criaturas híbridas de humano y animal que se veían como un castigo de los pecados extranjeros, de luteranos y otomanos. “Si se vendían, y hay muchísimos, es porque estas noticias se creían”, explica Pena sobre este amarillismo de la Edad Moderna.

¿Y qué ocurría A Coruña? En Galicia el fenómeno de la impresión de noticias “más tardío”, explica Pena, y las aunque la ciudad generaba noticias, normalmente se publicaban en Madrid o Barcelona: “no tenemos constancia de noticias impresas en la provincia hasta el siglo XVII, y en la ciudad, que sepa, no hasta el XIX”.

Las noticias sobre la ciudad se centran sobre todo en el puerto, del que partían y llegaban personalidades y armadas. Entre los fondos del catálogo se encuentra una relación publicada en Madrid y Barcelona sobre la incursión que realizó la flota francesa contra la ciudad en 1639, por parte del artillero español don Juan de Santans: los galos habían reunido decenas de navíos, pero no pudieron desembarcar por el fuego de los castillos de San Antón, San Diego y Santa Cruz, y se retiraron tras una batalla naval contra la flota de la guarnición en la que perdieron varios barcos.

También hay noticias de sociedad, como la salida en 1554, de Felipe II, siendo todavía príncipe, a Inglaterra, para contraer matrimonio con María Tudor; ya con él de rey, la ciudad volvería a las crónicas por la reunión en su puerto de una armada para atacar Inglaterra, y por el ataque de Drake. En un plano menos conflictivo, es “famosa” la relación de las exequias en la ciudad por la muerte de Margarita de Austria-Estiria, en 1612, y la visita por accidente de Mariana de Neoburgo, que se dirigía por mar a Santander para casarse con Carlos II cuando una tormenta la obligó a desembarcar en Mugardos y, como consecuencia, hacer visitas a varias las villas gallegas.

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