Un joven de 28 años, residente en A Coruña, ha sido detenido como supuesto autor de una estafa de 12.000 euros a un empresario granadino, cometida a través de internet mediante la técnica conocida como "man in the middle" (hombre en medio) de suplantación de identidad.

La investigación comenzó el pasado marzo después de que el responsable de una empresa granadina ubicada en el polígono Juncaril de Albolote denunciara que alguien había suplantado la identidad de una empresa jiennense con la que trabaja de forma regular y habían conseguido que le abonaran fraudulentamente unas facturas por valor de 12.000 euros.

Antes de que esto ocurriera, los ciberdelincuentes atacaron los servidores de la empresa del denunciante y consiguieron las credenciales de administrador. Con ellas accedieron a la cuenta de correo electrónico de la empresa y espiaron todo el tráfico financiero.

De esta forma consiguieron detectar que una empresa de Jaén les solicitaba el pago de dos facturas por valor de 12.000 euros.

Suplantaron la identidad de esta última empresa y enviaron a la víctima una solicitud de cobro con un número de cuenta diferente.

Según ha informado este lunes la Guardia Civil, la víctima comprobó que los datos aparentemente eran correctos y realizó el pago y, unas semanas después, la empresa suplantada requirió el pago de la factura y fue entonces, al contrastar los datos, cuando supieron que habían sido víctimas una estafa que en el argot de la ciberdelincuencia se conoce como "man in the middle" (hombre en medio).

Un equipo de la Guardia Civil de Granada se hizo cargo de las pesquisas y los investigadores confirmaron que los ciberdelincuentes habían accedido de manera ilegal al sistema del correo electrónico de la empresa.

La Guardia Civil siguió la pista del dinero y averiguó que el presunto autor de la estafa era un joven de nacionalidad brasileña que actualmente reside en A Coruña.

Los agentes granadinos se pusieron en contacto con sus homólogos de la Comandancia de A Coruña, les facilitaron la identidad del sospechoso y fueron estos últimos los que lo localizaron y procedieron a detenerlo.

La Guardia Civil sospecha que el detenido forma parte de una organización criminal internacional, por lo que la investigación continúa abierta.