Se sabe de Sebastián Martínez Risco que nació en Celanova y murió en A Coruña; que fue jurista y que presidió la Real Academia Galega en 1960. También que, bajo su gobernanza, se tomó la decisión de honrar a las letras patrias cada 17 de mayo, instaurando el Día das Letras Galegas. A falta de hurgar un poco más en su biografía, no existe constancia, a día de hoy, de registros que lo sitúen curando enfermos con la fe, caminando sobre los mares, predicando o convirtiendo el agua en vino. Aún así, hay quien ha decidido, con criterio indeterminado, canonizar su figura de forma oficiosa en el cartel de las fiestas de Matogrande, que se desarrollarán este fin de semana en la calle del barrio que lleva el nombre del jurista, rebautizado en el cartel como “San Sebastián Martínez Risco”. Alabado sea, en cualquier caso.
