Los bomberos acudieron ayer a una vivienda del número 33 de la calle Varela Silvari por un aviso de caída de cascotes. En el interior había cuatro personas que tuvieron que ser desalojadas por seguridad. El inmueble estaba en mal estado y tuvo que ser precintado y, según fuentes municipales, previsiblemente se hará alguna obra para evitar nuevos desprendimientos. El incidente obligó a la Policía Local a cortar un tramo de la vía que va desde la calle Mercado a Panaderas.