SI NO LO LEO NO LO CREO

Con pico en Riazor en busca de la cantera del Dépor

Aficionado disfrazado a modo de protesta en Riazor

Aficionado disfrazado a modo de protesta en Riazor / VICTOR ECHAVE

Antón Peruleiro

La rica historia del pensamiento coruñés firmó ayer una de sus páginas más ilustres con un homenaje a Diógenes de Sinope. Este filósofo, uno de los representantes más conocidos de la escuela cínica griega, recorría las calles de Atenas haciendo performances de denuncia: un día le tiraba un gallo desplumado a Platón para burlarse de sus definiciones, otro escupía en la cara a un hombre que quería prohibir expectorar, y lo que hizo en el Ágora lo callamos para no causar escándalo en estos tiempos pacatos. En una de sus intervenciones más renombradas recorrió la ciudad con una lámpara encendida, de día buscando un hombre honesto. Ayer su escuela revivió en las cercanías de Riazor: vimos allí antes del partido a un aficionado disfrazado de minero, con pico, casco y cuerda con un cartel que preguntaba “La cantera del Dépor, ¿dónde está?”, criticando la falta de jóvenes jugadores locales en el campo. La lámpara del casco estaba encendida pese a que era de día: quien no quiera ver que este hombre ha leído la biografía de Diógenes firmada por Laercio, ciego está.