Solo mil edificios de más de 50 años han pasado revisión a ocho meses para que termine el plazo

El Ayuntamiento ha recibido desde mayo de 2021 un total de 1.247 inspecciones técnicas de inmuebles, que deben superar los edificios de más de 50 años de antigüedad y los catalogados. En aquel mes se reactivó la revisión de los inmuebles de más de medio siglo que había quedado anulada con una sentencia del Tribunal Constitucional. De esos 1.247 inmuebles, 1.095 tienen más de 50 años, entre ellos 70 catalogados, y 152 son más recientes pero deben superar la inspección por estar protegidos, según los datos proporcionados por fuentes municipales. La cifra sigue siendo demasiado baja, teniendo en cuenta que, según el Catastro, más de 46.000 edificios de la ciudad se construyeron antes de 1973. Tienen, por tanto, ocho meses para superar la inspección, dentro de los plazos marcados por la Xunta.

El Concello, de acuerdo con las mismas fuentes, requirió a los propietarios la mayor parte de los informes de evaluación de edificios (IEE) recibidos —antes denominados inspecciones técnicas de edificios (ITE)—, mientras que solo 71 comunidades iniciaron sus respectivos procedimientos por iniciativa propia. El resto de inmuebles que aún no han hecho la inspección tienen hasta mayo de 2024 para llevarla a cabo y presentar sus informes, según indica el decreto de la Xunta que recoge el cambio normativo de la ley estatal reguladora de las IEE a partir del fallo del Constitucional.

La ciudad sumó tres años sin ninguna inspección hasta el mes de mayo de 2021, durante la paralización de los trámites a la espera del cambio en la ley. Según la memoria de gestión municipal del año anterior, había medio millar de expedientes paralizados que esperaban dictamen técnico. Desde entonces, más de 1.200 edificios han pasado la revisión, de los que 1.095 tienen una antigüedad superior al medio siglo. El Ayuntamiento añade que de los 1.247 procesos iniciados en los inmuebles más antiguos y en los catalogados se detectaron incidencias en 19 casos, por lo que se requirieron subsanaciones a los propietarios. Si estos no proceden a hacerlas, el Concello asume la ejecución subsidiaria en el caso de que sean deficiencias de seguridad.

Las estadísticas del Catastro Inmobiliario hasta el tercer trimestre de este año revelan que en A Coruña hay 45.785 edificios que se construyeron antes de 1970 (casi 9.000 antes del año 1950). La década siguiente, hasta 1979, fue en la que más se levantaron, más de 34.700. El cómputo total suma 172.842 inmuebles en la ciudad.

Las IEE suelen tener protagonismo cuando se producen incidentes relacionados con la seguridad de los edificios. Un caso reciente es el del inmueble que hace esquina en la plaza de Vigo con la calle Menéndez Pelayo, del que en julio de este año cayeron cascotes a la vía pública y estuvieron a punto de dañar a personas que estaban sentadas en una terraza de hostelería. Expertos consultados por este diario, alertaron entonces de que el hormigón de mala calidad usado en la construcción de edificios de hace más de 50 años había motivado la caída de elementos de la fachada a la calle.

El Ayuntamiento, por un lado, y el Colegio Oficial de Administradores de Fincas de Galicia (Coafga), por otro, instan a los propietarios de las construcciones residenciales de más de medio siglo de antigüedad a que encarguen el nuevo informe de evaluación de los edificios para cumplir con el decreto de la Xunta que entró en vigor en mayo de hace dos años, ya que estos informes, según apuntaba el Concello, “no avanzan al ritmo que deberían”.

El documento, que tiene que ser realizado por técnicos especializados, acredita la situación en la que se encuentra un inmueble en relación con su estado de conservación, sus condiciones de accesibilidad y su eficiencia energética.

Hasta 2017, cuando se paralizó la tramitación de ITE, pasaron por el proceso de inspección todos los edificios de Ciudad Vieja y Pescadería afectados por el Plan Especial de Protección y Reforma Interior (Pepri), además de los catalogados en el plan general, los de una antigüedad de más de 40 años ubicados en áreas de rehabilitación declaradas y los de más de 40 del resto de la ciudad; en la actualidad el requisito es para los de más de 50 años.

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