El Concello inicia la venta forzosa de un solar ruinoso que sacó a subasta

El Concello acaba de abrir el procedimiento de venta forzosa de uno de los ocho edificios ruinosos que a comienzos de este año anunció que sacaría a subasta para garantizar su rehabilitación ante la desatención que le dedican sus propietarios. Se trata del solar vacío del número 6 de la calle Herrador, en la zona de Pescadería, que fue el segundo de los inmuebles que la administración local sacó a puja forzosa en abril pasado.

Este trámite, publicado ayer en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP), supone un paso hacia la expropiación del solar “ante el incumplimiento de los deberes relativos a la edificación, a la conservación y a la rehabilitación” por parte de los dueños. De acuerdo con el anuncio del BOP, el titular del inmueble es la sociedad Inversiones Inmobiliarias Canvives, con domicilio en Madrid, dedicada a la compraventa de bienes inmobiliarios. En el muro del solar está pegado un cartel de la inmobiliaria Aliseda que anuncia “suelo en venta”; esta empresa, que tiene en su cartera diversas propiedades de la Sareb, tiene su sede en la misma dirección que Canvives.

Antes que este solar de la calle Herrador, el Concello sacó a subasta el edificio ruinoso del número 3 de la calle Damas, en la Ciudad Vieja, cuyo propietario fue multado siete veces por no rehabilitarlo tras requerimientos de la Administración. Y posteriormente salió a subasta el inmueble del número 72 de la calle Orzán. Pero el dueño de este edificio, así como el del número 130 de la misma calle, vendieron sendas construcciones para evitar la subasta forzosa y los nuevos propietarios solicitaron al Concello las correspondientes licencias para rehabilitarlos. Según fuentes municipales, no ha habido nuevos “movimientos” respecto al resto de edificios para los que ya se inició el proceso de subasta ni para los demás.

El listado de inmuebles del plan municipal lo completan el número 202 de la calle Orzán, el 104 de San Andrés, el 4 de la calle Pastoriza y el 8 de la calle Santa Lucía, que durante más de un año tuvo una red de protección tras la caída a la acera de elementos de su fachada.

Esta iniciativa puesta en marcha por el Concello tiene como finalidad que las propiedades en estado de ruina se puedan “poner en el mercado y recuperarlas, bien porque la propiedad actúe directamente vendiéndolas o porque se subasten si no lo hacen”, explican desde el Concello. “Los trámites son largos”, añaden las fuentes. En caso de que nadie puje por estos edificios en mal estado, el Ayuntamiento podrá quedarse con la propiedad por el 75% de su valor.

El solar de la calle Herrador ocupa una finca con una parte cubierta y un terreno trasero descubierto y destinado a patio. Está destinado a planta baja y dos pisos.