Más de 300 coches para viajar por la historia de la automoción desde A Coruña

MAHI abre sus puertas este sábado en Sabón con vehículos que van desde 1886 y objetos históricos como teléfonos antiguos o las butacas del cine París

El Museo de Automoción e Historia de A Coruña se presenta en sociedad

Iago López

Un tranvía de A Coruña que unía Puerta Real y Riazor da la bienvenida a los visitantes del Museo de Automoción e Historia (MAHI) que este sábado abre sus puertas en el polígono de Sabón, en Arteixo. “Ha sido un trabajo de muchas décadas”, asegura Ángel Jove González, fundador del museo y presidente de la Fundación Jorge Jove, que lleva el nombre de su hermano fallecido en 1998 y por el que ha querido perseguir este sueño.

Dentro de estas naves que ocupan 20.000 metros cuadrados uno puede encontrar una reproducción de un Mercedes Benz de 1886, varios Jaguar, Rolls Royce, Ferrari o Porsche, los camiones que ganaron el Dakar 86, un coche de Carlos Sainz y Luis Moya o joyas cedidas por las dos marcas españolas más icónicas del pasado siglo, Hispano Suiza y Pegaso. La mayor parte de los coches pertenece a Ángel Jove Capellán, padre del fundador del museo.

“Todo aquí tiene su historia”, resume Jove. Y es por eso que cada sala se dedica a un campo diferente: la música, la literatura, los bomberos, los servicios, la fotografía, el arte, el cine o la moneda. Así, entre los vehículos históricos restaurados -salvo un Graham-P 610 totalmente destrozado-, el visitante puede ver teléfonos antiguos, máquinas de escribir, ropa de época, vinilos, tocadiscos, butacas del cine París y pósters de películas.

“Es incuestionable que es un patrimonio industrial tremendo. Desde el más mínimo objeto hasta el camión más grande están en perfecto estado de uso”, detalla Jove.

El museo, inaugurado este jueves con la presencia de los Jove y el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, y el alcalde de Arteixo, Carlos Calvelo, abre este sábado con un precio de 10 euros, aunque también hay entradas reducidas de 6 euros para estudiantes, pensionistas y grupos de más de 30 personas. Los menores de 5 años pueden acceder de forma gratuita. “Esperamos que tenga un calado importante”, añade Ángel Jove, cuyo primer coche también forma parte del museo. “Era un Seat 1500. A mí me gustaban mucho las motos pero mi palmarés fue en accidentes y mi padre y los médicos me dijeron que las dejase. Así que restauramos el Seat y fue mi primer coche”, confiesa el fundador de un museo que también tiene tienda de recuerdos y una cafetería en la que se puede escuchar Elvis Presley en una gramola.

Un lugar para “despertar inquietudes”

Ángel Jove asegura que MAHI no nace con la idea de “cuestionar o valorar” sino que lo que pretende es “despertar inquietudes”. “El objetivo es ver los avances del siglo XX para seguir trabajando y que no cometamos más errores”, dice el presidente de la Fundación Jorge Jove y fundador del museo. “Nunca nos podrán quitar la ambición de disfrutar, así que disfrutemos de conocer la historia”, añade.

Así, junto a cada vehículo hay un código QR que ofrece información más detallada de la pieza. En su recorrido, los visitantes también encontrarán motores seccionados que dejan a la vista lo que normalmente está oculto.

MAHI nace, además, con una “componente pedagógica”, como explica el propio Jove, por lo que se ofrecerán talleres interactivos ligados a la temática de cada sala, dirigidos algunos de ellos a niños y otros a todos los públicos, entre los que destacan un taller para trabajar la madera y otro dedicado a la mecánica.

Jove confiesa sentirse “muy orgulloso” de haber conseguido “ilusionar a instituciones privadas y particulares” que se han queirdo sumar “a este proyecto innovador y único”. Ahora, avanza, será el momento de llamar a instituciones públicas_“para hacer colaboraciones” e intentar que el proyecto siga creciendo porque el plan es que la colección siga sumando vehículos.