El Concello detecta daños severos en la estación de San Roque, por la que pasa el 80% de las aguas residuales

La corrosión ha pasado factura en los últimos años a la Estación de Bombeo de Aguas Residuales (EBAR) de San Roque, por la que pasa el 80% de las aguas residuales de la ciudad antes de llegar a la depuradora de Bens. El informe técnico encargado por el Concello recoge “daños severos” y “muy severos” en la estructura de hormigón del forjado de techo de las instalaciones, que urgen acometer “a la mayor brevedad posible” unos trabajos de reparación y ampliación de la vida útil de las zonas afectadas. El Ayuntamiento ha encargado ya las obras por un importe de 126.323 euros.

A raíz de los daños estructurales por corrosión detectados en el forjado de techo del foso de la estación de bombeo, el Ejecutivo de Inés Rey encargó un estudio para recoger toda las patologías y analizar su causa, alcance, nivel de daños y la urgencia para acometer las intervenciones, proponiendo las medidas correctoras necesarias.

Y los resultados del informe confirman las sospechas. La armadura principal —formada por unas barras de acero imprescindibles para resistir toda la compresión a la que están sometidos los pilares— se encuentra afectada por “un proceso avanzado de corrosión”, mientras que la estructura de hormigón armado está sometida “a una exposición ambiental muy agresiva”. Es por ello que los técnicos urgen a llevar a cabo los trabajos de reparación y refuerzo de las estructuras para que prolonguen su vida útil.

Como recoge el informe técnico, el forjado de techo de la estación de bombeo de aguas residuales presenta una antigüedad de unos 23 años, que han pasado factura a las instalaciones, pegadas al nuevo edificio de cristaleras oscuras del polígono de Náutica. Ya en 2018 el Concello tuvo que llevar a cabo unos trabajos de renovación de la estación para mejorar la eficiencia energética y del tratamiento de obras, un proyecto al que destinó 173.500 euros.

En este caso, los técnicos urgen una intervención estructural en la estación, donde ha detectado daños “severos” en los paneles ubicados fuera de la vertical del pozo, teniendo en cuenta la “falta de protección” que presenta el acero actualmente, las consecuencias del posible fallo, así como su “evolución esperable” en base a la velocidad de corrosión estimada. Es por ello que el informe técnico urge llevar a cabo la actuación en menos de un año. “Teniendo en cuenta a la velocidad que progresa consideramos recomendable actuar a la mayor brevedad posible”, recomiendan los profesionales, puesto que por el momento se puedes solucionar con una “actuación de saneo superficial”. “Si se deja avanzar más el proceso patológico, es probable que en cuestión de uno o dos años resulte necesario acometer un saneo en profundidad”, resalta el informe.

Los técnicos también aprecian daños estructurales en estado “muy severo” en los paneles ubicados en la vertical del pozo y bajo la calzada y fuera de la misma, teniendo en cuenta la falta de protección que presenta el acero actualmente, donde también prevé una evolución negativa en base a la velocidad de corrosión de la estructura. “El avance del frente ácido ha alcanzado el armado”, refleja el informe, en el que los técnicos urgen acometer la reparación en el plazo máximo de un año. Alertan de que si se deja avanzar el deterioro puede llegar el punto en el que sea necesario “demoler y reconstruir la estructura”. Ante esta situación, el Concello ha encargado ya las obras necesarias para paliar el deterioro de la estación de bombeo y evitar males mayores en un futuro.

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