Alquileres prohibitivos en la costa gallega: hasta 2.900 euros una semana, y Riazor, en el 'top' de la provincia

Este verano tocará rascarse más el bolsillo. Habrá alquileres en primera línea de playa que exigirán no solo todo un sueldo sino también la extra para pasar tan solo una semana de vacaciones. La factura será tan abultada que en algunos destinos superará el coste de un circuito de 15 días para conocer la historia de Egipto, descubrir los paraísos de China o recorrer Perú hasta llegar al tesoro de Machu Pichu. El aumento de los precios en las viviendas vacacionales para este 2024 obligará a echar cuentas a quienes este año quieran irse a una zona de playa: 1.080 euros media por siete días en la costa gallega, casi un 14% más que el verano pasado, según el estudio publicado este jueves por el Grupo Tecnitasa sobre los precios del arrendamiento semanal en la primera línea de playa de las principales zonas de costa españolas en agosto.

Este verano, por tanto, habrá que realizar un desembolso medio por un destino de playa en Galicia de 130 euros más que en 2023. Entonces la renta semanal estaba en 950 euros. Ese incremento se sucede al ya experimentado el año pasado en la comunidad, con un alza del 6%. El precio de los arrendamientos en primera línea de playa es este verano ya un 56% mayor que el año del estallido de la pandemia, periodo en el que rondaba los 690 euros.

Hasta 2.350 euros de diferencia hay entre los alquileres por semana más caros y los más baratos en Galicia para estas vacaciones. En el extremo opuesto está Asturias, el territorio con la menor diferencia de precio entre los arrendamientos más exclusivos y los más económicos, con una oferta muy homogénea en apartamentos entre 50 y 75 metros cuadrados: entre 560 y 780 euros.

En el mapa vacacional del país, el coste medio para este mes de agosto en una zona de playa en España se sitúa en los 1.160 euros, casi un 10% más que hace un año, lo que se traduce en 105 euros más que en 2023. El incremento sube casi a doble dígito, tras la moderación que habían experimentado los alquileres vacacionales en la costa el ejercicio pasado, que se fijó en un 3,75% por debajo del IPC. Si se compara con el año de la pandemia (2020), con un arrendamiento medio por semana de 826 euros en la costa española, el incremento se eleva por encima del 40%.

En el top de los apartamentos más caros para este verano está Galicia, aunque también destaca por colgar las ofertas más económicas: de los 2.900 euros semanales en A Illa da Toxa (Pontevedra) por un piso de 80 metros cuadrados a los 550 por un apartamento en O Vicedo o Burela, en Lugo —entre 100 y 200 euros más que el verano pasado—.

En la provincia de A Coruña, la ciudad herculina es la que presenta las tarifas más altas, con unos costes que alcanzan los 1.300 euros la semana en la playa de Riazor (frente a los 1.050 euros de agosto pasado), por delante de Santa Cruz-Bastiagueiro (Oleiros), con 1.100 euros. Este último destino, a poco más de diez kilómetros de María Pita, lideraba en 2021 los precios en la provincia. En el extremo opuesto da la oferta vacacional en A Coruña está Portodosín, la zona de playa más económica de la provincia para este verano: 725 euros la semana.

Pontevedra es la provincia la que presenta las tarifas más altas de Galicia para estas vacaciones, con una media de 1.3325 euros la semana, seguida de la oferta en A Coruña, con una media de 860 euros y finalmente, Lugo, con un coste de 810 euros, según detalla Olga Gómez, delegada de Tecnitasa en Galicia.

Estos costes explican la imposibilidad de cada vez más gallegos de pagarse unas vacaciones. El 40% de los gallegos no pueden permitírselo, siete puntos por encima de la media nacional (33%), según un informe publicado por la Red Europea de Lucha contra la Pobreza y Exclusión Social (EAPN).

El precio del alquiler en primera línea de la playa en Galicia está muy próximo al del conjunto de localidades de la costa en España: 1.160 euros. Hay provincias, como Huelva o Girona, donde los precios subieron entorno al 3%, pero la mayoría oscilan entre un 3% y un 6%, como es el caso de A Coruña. Pero en el grupo de las que encarecieron sus tarifas entre un 6 y un 12% se encuentra Pontevedra y ya por encima del 12%, junto con Cantabria, Las Palmas y Santa Cruz de Tenerife está la costa de Lugo, tal y como revela el estudio de Tecnitasa.

Los destinos más caros en primera línea de playa superan los 3.000 euros la semana, como es el caso en las Baleares de Santanyí (3.300), Ibiza (3.100) y Pollensa (3.000), o en Puerto Banús, en Marbella (3.000) o muy cercanos a esa cifra (2.900 euros) en Illa da Toxa, pasando por destinos más asequibles que rondan la media nacional y que se pueden encontrar en las playas del norte, este y sur de España. ¿Lo más económico? 500 euros en la Comunidad Valenciana, en Moncófar y Vinaroz, en la provincia de Castellón, donde se pueden arrendar apartamento de 70 metros cuadrados por esa renta semanal.

Desde Tecnitasa, su director técnico, Fernando García Marcos, destaca que en el conjunto nacional, el incremento en los últimos tres años ha sido de alrededor de un 25%. Sin embargo, matiza que el mercado inmobiliario convencional ralentiza el número de transacciones y contiene los incrementos de valor, pero en el mercado de alquiler vacacional, por en contrario, continúan incrementos promedios significativos”.

Las comunidades que mayor diferencia de precios tienen entre lo más exclusivo y lo más económico, con importes que superan los dos mil euros semanales, son: Galicia, Andalucía e Islas Baleares.

De esta manera, los precios en Galicia pueden varían en una horquilla de entre 550 euros y 2.900 euros; en Andalucía, entre casi 2.300 euros y 730 euros, e Islas Baleares, entre 3.300 euros y 1.175 euros.

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