Ciclismo

Vingegaard: “Me gustaría volver”

El danés habla maravillas de O Gran Camiño antes de partir hacia la París-Niza para su primer duelo con Pogacar

Vingegaard, en la Praza do 
Obradoiro, tras su victoria. | // LAVANDEIRA

Vingegaard, en la Praza do Obradoiro, tras su victoria. | // LAVANDEIRA / Víctor Furelos

Víctor Furelos

O Gran Camiño llegó a su fin y su organizador, Ezequiel Mosquera, ya piensa en la próxima edición. Pero no es el único. Jonas Vingegaard, el flamante vencedor de la ronda gallega, también hizo balance de su primera participación y no pudo ser más contundente: “Había muchos aficionados en la carretera. E incluso cuando hacía mal tiempo todavía había fans. Es muy bueno que apoyen esta carrera. ¿Repetir el año que viene? En realidad sí me gustaría volver aquí. Disfruté esta semana y esta carrera”.

El último ganador del Tour de Francia corrió en Galicia con la intención de preparar la ronda gala. Tiene planificados 26 días de competición antes de la Grande Boucle, pero a pesar de ser pruebas para testar y mejorar su estado de forma, el corredor danés tiene claro que no rebaja ni un ápice su ambición competitiva: “Quiero intentar ganar tanto como sea posible. Todavía estoy ansioso por ganar y todavía quiero ganar muchas carreras. Creo que para mí esta es la preparadción perfecta para la París-Niza. Estoy muy feliz y orgulloso de ganar todas las etapas y la general. Así que supongo que no podría ser mejor”.

Jonas Vingegaard no pudo cuajar mejor actuación. Tres etapas llegaron a meta, tras la anulación de la conclusión de la jornada inicial en Lugo por la nieve, y en las tres ocasiones fue el danés quien levantó los brazos en señal de victoria. El ciclista del potente equipo Jumbo Visma confiesa: “Estoy feliz con la semana que hemos tenido aquí. Ha sido una buena semana de carreras y realmente me gustó y disfruté. Es una región agradable y, de hecho, también es una carerra superagradable. Y sí, estoy en buena forma, así que también estoy feliz con mi propio desempeño”.

Ahora se enfrentará a la París-Niza, que este año contará con dos finales en alto y una crono por equipos de 32 kilómetros en la tercera etapa. En la carrera que tendrá lugar entre el 5 y el 12 de marzo se medirá por primera vez desde el último Tour a su gran rival en la carrera francesa, el esloveno Tadej Pogacar (UAE Emirates), que llega tras arrasar en la clásica Jaén Paraíso y adjudicarse tres de las cinco etapas de la Vuelta a Andalucía.

Pero no estarán solos. La París-Niza contará además con una participación de lujo formada, entre otros, por el vasco Gorka Izagirre (Movistar), los colombianos Egan Bernal y Daniel Felipe Martínez (ambos en el Ineos Grenadiers), el francés Romain Bardet (Team DSM), el bretón David Gaudu (Groupama-FDJ), el británico Simon Yates (BikeExchange-Jayco), el belga Tim Wellens (UAE Emirates), el danés Mattias Skjelmose (Trek-Segafredo), el alemán Maximilian Schachmann (Bora-Hansgrohe), el australiano Jack Haig (Bahrain Victorious), el estadounidense Neilson Powless (EF Education-EasyPost) o los pujantes Kevin Vauquelin (Arkéa Samsic) y Matteo Jorgenson (Movistar), a los que hay que sumar velocistas como Mads Pedersen, Arnaud Démare, Alexander Kristoff. Michael Matthews, Tim Merlier, Sam Bennett, Arnaud de Lie y Bryan Coquard.

“Un equipazo de gente”

Ezequiel Mosquera es el alma de O Gran Camiño. Desde su empresa, Eme Sports, se encarga de la organización de una prueba ciclista que este año se enfrentó a numerosas adversidades. “La verdad es que es un equipazo de gente. Sin todos los que me rodean yo no soy nadie y esta carrera tampoco podría ser lo que es”, confiesa. “Es un orgullo para nosotros que Vingegaard hable así de esta carrera”, comentó el exciclista del Xacobeo tras conocer los elogios del campeón danés y su intención confesa de regresar a O Gran Camiño. “Quisiera agradecer públicamente el comportamiento tanto de él como del resto de corredores, aunque no me sale de la cabeza la forma en que Vingegaard compitió. Hasta en la crono parecía que se jugaba la vida en cada curva para ganar cuando ya tenía media vuelta en el bolsillo. Fue todo un espectáculo”.