RCD Mallorca

El propietario del restaurante de Son Moix defiende la presencia de las bailarinas y asegura que llamarles gogós es "denigrante"

Leonardo Melucci, dueño de El Presuntuoso, las define como "artistas"

"Este tipo de experiencia ha sido consensuada entre el club y nosotros"

Explica además que pretenden importar el modelo norteamericano de espectáculos antes, durante y después de los partidos

Una imagen del Fondo Norte de Son Moix.

Una imagen del Fondo Norte de Son Moix. / MANU MIELNIEZUK

Jordi Sánchez

Tras la polémica surgida en las redes sociales esta mañana al publicarse un vídeo en el que se podía observar a una bailarina en la zona VIP del estadio Mallorca Son Moix durante el partido ante el F.C.Barcelonael propietario del restaurante El Presuntuoso, Leonardo Melucci, ha explicado a Diario de Mallorca, del grupo Prensa Ibérica, que se trata de "una experiencia aparte del fútbol" y ha apuntado que el término gogó es "ofensivo" para unas bailarinas a las que considera "artistas".

"No estamos en una iglesia, es un restaurante", ha comentado el propietario en su defensa ante el revuelo causado esta mañana, destacando que el mundo del fútbol como espectáculo está evolucionando, y que desde el club, en trabajo conjunto con el propio restaurante, quiere importar el modelo americano: "Los campos se están transformando en esto. En América hay cheerleaders durante la previa y mucho más espectáculo".

En relación al propio Real Mallorca, ha asegurado que "este tipo de experiencia ha sido consensuada con el club", y ha querido resaltar la importancia de ofrecer algo "más allá del fútbol". "Se pide algo diferente, el presidente tiene la mentalidad abierta", ha comentado en referencia a Andy Kohlberg, presidente del Real Mallorcacomo muestra de la aprobación del club ante este tipo de espectáculos. El propio Mallorca, tal y como cuenta Melucci, quería que se crease "un espacio dinámico".

"Esto es arte, es espectáculo. El campo se ha hecho para que se hagan cosas", ha contado Melucci, confesando además que a partir de noviembre se podrá acceder al restaurante en día en los que no se juegue ningún partido.

También ha explicado que cada jornada se ofrecerá una experiencia diferente y que, al igual que podrían aparecer magos o DJs, también podrían regresar las bailarinas en alguna jornada. "Hemos creado algo que pide el mercado", asegura.