Rugby

10-16 | El CRAT se queda sin Copa

No pudo convertir en puntos su dominio y claudicó en la final frente al Majadahonda

La plantilla del CRAT con las medallas y el trofeo de subcampeón de la Copa RFER.

La plantilla del CRAT con las medallas y el trofeo de subcampeón de la Copa RFER. / La Opinión

El poderío físico del Majadahonda y su superioridad en el juego de pie decantaron la final de la primera edición de la Copa RFER en la que el CRAT Residencia Rialta aspiraba ayer en Las Terrazas (Alcobendas) al primer título de la temporada y al que dijo adiós tras perder por 10-16 en un partido muy igualado y en el que, con el dominio de la posesión, buscó la remontada sin suerte hasta el final. A las coruñesas todavía les queda en juego la Liga Iberdrola, que retomarán en dos semanas con la disputa de las semifinales, todavía sin conocer rival que saldrá del duelo en cuartos de final entre El Salvador y el Barça.

El CRAT formó prácticamente con su quince de gala con Divi, Ali, Maica, Leyre, Pimi, María, Judith, Elsa, Alba, Ana, Ale, Ichi, Ceci, Inês y Mariana. Además, desde el banquillo salieron Alborota, Claudia, Maitane, Miriam y Valle. El duelo arrancó muy igualado, con los dos equipos luchando por el control del oval. Las madrileñas parecían un punto por encima y en el minuto 12, se adelantaron en el marcador con un drop, una patada entre los tres palos, de Zahía Pérez. El CRAT se repuso, incluso se quedó a escasos metros de la línea de marca. Pero el Majadahonda hizo sangre de sus errores y con un golpe de castigo de la ucraniana Havrylova y un ensayo de Cayetana Álvarez, transformado por Havrylova, estiró el marcador hasta el 0-13.

Jugada del partido entre el CRAT y el Majadahonda.

Jugada del partido entre el CRAT y el Majadahonda. / La Opinión

Reaccionaron las coruñesas para llegar con vida y opciones al descanso, pues antes del paso por vestuarios dos ensayos, de Elsa Porto y Alejandra Fernández, devolvieron prácticamente la igualdad (10-13). Ninguno de los dos fue convertido, lo que al final del partido pudo haber sido decisivo porque en la segunda parte, completamente de dominio de CRAT, el Majadahonda, con el resultado a favor, se dedicó a defender y a dejar que fueran las rivales las que llevaran todo el peso y el castigo de los minutos en contra. Y justo cuando el partido llegaba a los minutos finales, sufrió un último puntapié de castigo, ejecutado por Zahía Pérez, que sentenció el encuentro a favor de las madrileñas y la recién creada Copa RFER se fue para el Silicius Rugby Majadahonda a pesar del gran partido de las coruñesas.

En los tres duelos de la temporada, dos victorias para las de la capital y una para las de A Coruña, que pretenden tomarse la revancha en la lucha por el título de Liga.

Artime: “Fueron más eficaces en los tiros a palos”

“Ellas fueron más eficaces durante todo el partido en los tiros a palos y eso les permitió ganar”, resumía Pablo Artime, entrenador del CRAT, tras la derrota en la final de la Copa RFER contra el Majadahonda por 10-16. Las coruñesas anotaron dos ensayos. Solo uno el rival, con una transformación, dos puntapiés de castigo y un drop, más puntos con el pie que con la mano.

“El partido fue muy ajustado en el marcador y en el juego. Ellas dominaron claramente los primeros minutos de la primera parte debido a la eficacia física y el control del juego de balón en el suelo. Pero poco a poco fuimos mejorando y consiguiendo dos ensayos. La segunda parte el dominio fue nuestro de principio a fin pero ellas se defendieron con todo y lograron impedir que consiguiéramos los puntos”, añadió.

El técnico asturiano se quejó además de que el campo neutral no favoreció a su equipo porque no se jugó a medio camino entre una localidad y otra, sino en Alcobendas, prácticamente al lado de Majadahonda y a seis horas en bus de A Coruña: “Como siempre los viajes cansan más al que se tiene que desplazar desde más lejos y yo creo que eso nos debilitó un poco”.

Artime se centra ahora en la liga, a la que le queda semifinales y final. Y por eso espera que las lesiones de Mariana Romero y de Leyre Bianchi queden en poca cosa. “Ojalá sean solo pequeños golpes y lesiones que nos permitan seguir contando con ellas para los partidos que quedan”, dijo.