José Eduardo Álvarez-Naveiro, jefe de los servicios jurídicos de NCG, responsabilizó al expresidente de Novagalicia, José María Castellano, del fondo y la forma en que el banco negoció con los responsables de empresas gallegas que en 2011 invirtieron 70 millones en NCG y un año después perdieron su capital con el rescate europeo de la entidad.

En su declaración como testigo en el primer juicio contra el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) y Novagaliciacontra FROBy Novagalicia, Álvarez-Naveiro, que ya era el máximo responsable de la asesoría jurídica con Castellano, explicó que fue el exdirectivo quien transmitió a los inversores que la entidad era solvente, a pesar de que el Banco de España acaba de valorarla en 181 millones de euros. El abogado y también secretario del consejo de Abanca, se desvinculó de la operación y advirtió de que sólo puede remitirse a las actas de las reuniones celebradas hace ahora tres años.

El juicio que se celebra esta mañanajuicio y concluirá mañana con las pruebas periciales que presentarán las partes, fue promovido por Hijos de Rivera, Copasa, Inversiones Subel (de Luis Somoza, expresidente de Azkar), Inversiones Gallegas del Cable, Concable Inversiones, Río Breiro (Jealsa) y Coren, y es el primero de los tres que están previstos en los próximos días en los juzgados de Primera Instancia de A Coruña.

En la vista de esta mañana, declararon los máximos responsables de Hijos de Rivera, José María Rivera; Inversiones Gallegas del CableConcableInversiones Subel Río Breiro CorenCopasaarriesgaron capital FROBbanco empresarios fondo de rescate bancariorecapitalización

Novagalicia fondo de rescate y a Novagalicia de la entidad y, por lo tanto, en el precio de las acciones del banco. Pretenden recuperar la inversión perdida con la operación acordeón previa a la inyección de 5.425 millones de euros del rescate europeo.