La vida de Daniel Noal ha sido un ir y venir constante por la geografía gallega. Más concretamente por la costa de la comunidad. Y es que desde su Porto do Son natal ha acabado trabajando en Vigo después de estudiar en Pontevedra y pasar por algunos equipos como fisioterapeuta, como es el caso del Arosa. Ahora, a sus 27 años, es socio y ejerce en la firma Saúde Sport, donde lucha por labrarse un futuro en la que es su pasión.

Este sonense ve con preocupación de cara al futuro las dificultades de los jóvenes gallegos como él para encontrar un trabajo estable. "Muchos jóvenes logran su primer contrato serio con 30 años y con una base de cotización baja", critica.

Igual de contundente se muestra con la situación de la Seguridad Social en la comunidad, ya que está seguro que "va a afectar a la sociedad en general".

Como emprendedor, cree que "parte de la solución" está en cubrir "una demanda que pedimos los jóvenes: que se apueste por nosotros, por la gente que quiere emprender". Sin embargo, lamenta que hoy en día la realidad es la opuesta. "No creo que escaseen los empresarios con ganas de contratar a jóvenes, lo que escasean son ayudas para facilitar a quien quiere emprender", explica. Y añade: "Para montar un negocio hay que hacer una inversión muy alta con trámites burocráticos muy lentos".

Para Noal este es "el gran problema", la falta de apoyo a los emprendedores, pues entiende que con su esfuerzo se crearían más puestos de trabajo, de ahí que también sean necesarias "facilidades para poder mantener un negocio".