Las organizaciones de autónomos ATA y UPTA consensuaron una propuesta para que los trabajadores autónomos coticen en función de sus ingresos reales mediante un sistema de cinco tramos de cotización que beneficiaría especialmente a los trabajadores por cuenta propia con menores ingresos. En cualquier caso, la elección de la base de cotización seguiría siendo voluntaria. Según explicaron a Europa Press fuentes de ambas organizaciones, los autónomos cuyos rendimientos netos no lleguen al salario mínimo interprofesional (SMI) cotizarían a la Seguridad Social 50 euros al mes, aunque para ello tendrían que acreditar (con su declaración fiscal) que no superan el SMI.

Mientras, la Unión de Asociaciones de Trabajadores Autónomos y Emprendedores (Uatae) presentó ayer su propuesta para un nuevo sistema de cotizaciones sociales en el trabajo autónomo "más justo, solidario y contributivo" y con el que la recaudación podría elevarse "en más de 9.000 millones".