Uno de los principales objetivos de Hacienda es luchar contra el fraude fiscal y el blanqueo de capitales. Para llevar a cabo esta labor, trabajan mano a mano con los bancos, que están obligados a darle conocimiento de aquellas operaciones en efectivo que crucen ciertos umbrales.

El Banco de España ha informado en su página web de cuáles son las cantidades en efectivo a partir de las que los bancos deberán informar a Hacienda. Aquellos ingresos y retiradas en efectivo que superen los 3.000 euros serán comunicados. También los cobros de documentos como cheques, pagarés o letras que superen dicha cantidad pero, solo si la Agencia Tributaria considera que hay indicios de delito, procederá con las pesquisas pertinentes.

Los bancos también estarán obligados a aplicar una mayor vigilancia sobre aquellos envíos de dinero que de forma única o en acumulado trimestral superen esos 3.000. Además, deberán identificar a todas las personas que realicen operaciones con estas entidades que sean superiores a 1.000 euros.

El Banco de España también ha recordado que solo se puede llevar encima cierta cantidad de dinero en efectivo sin estar obligado a declararlo. En concreto, se permiten movimientos por territorio nacional de medios de pago de menos de 100.000 euros o su contravalor en moneda extranjera, mientras que para salidas o entradas solo se permiten cantidades inferiores a 10.000 euros.

En la actualidad, al margen del entorno bancario, no pueden pagarse en efectivo operaciones de 1.000 euros o más. Si se incumple dicha normativa, tanto el que paga como el que recibe el dinero pueden ser sancionados con hasta el 25% de la cantidad pero es importante señalar que estos límites de 1.000 euros no rigen en bancos u operaciones de cambios de moneda en locales habilitados.

Siempre que la circunstancia lo requiera, el banco puede pedir información adicional a sus clientes y por esta razón, el Banco de España recomienda a los ciudadanos que siempre almacenen los justificantes de sus operaciones.