Tras intensas negociaciones

El fondo británico Zegona compra Vodafone España por 5.000 millones de euros

El que fuera consejero delegado de Euskaltel y Jazztel hasta sus respectivas ventas, José Miguel García, será el máximo ejecutivo de la marca

Sede de Vodafone.

Sede de Vodafone. / EP

Sara Ledo

Después de muchas negociaciones y rumores, el fondo británico Zegona ha anunciado este martes la compra de Vodafone España por 5.000 millones de euros. El fondo, que prevé culminar la adquisición en el primer trimestre de 2024, deberá obtener el permiso del Gobierno en virtud de la Ley de Inversiones Extranjeras, aunque no prevén que esta autorización se demore mas de "tres o cuatro meses", según ha revelado el consejero delegado de Zegona, Eamonn O’Hare, en una rueda de prensa telemática. El objetivo, según ha añadido, es nombrar consejero delegado de la nueva Vodafone España al que fuera consejero delegado de Euskaltel y Jazztel hasta sus respectivas ventas, José Miguel García.

En un comunicado, Zegona explica que la transacción se realizará con un pago en efectivo de al menos 4.100 millones de euros y hasta 900 millones de euros en forma de acciones preferenciales en una entidad de nueva creación ('Newco') que utilizará los fondos para suscribir nuevas acciones ordinarias de Zegona. Esta nueva entidad se compromete a no ejercer sus derechos de voto en Zegona (salvo en el caso de una adquisición) y las acciones serán transferibles y reembolsables a más tardar seis años después de su emisión.

Según ha informado el fondo, la adquisición se financiará mediante una combinación de nueva deuda, financiación de Vodafone y una nueva ampliación de capital, según ha informado la compañía. Así, ha suscrito una financiación de deuda comprometida por valor de 4.200 millones de euros y una línea de crédito renovable por valor de 500 millones de euros. Por su parte, Vodafone aportará hasta 900 millones de euros de financiación y la ampliación de capital será de hasta 600 millones de euros de inversores internos. Después del aumento de capital, se prevé que la nueva línea de deuda genere una posición de deuda neta al cierre de 3.700 millones de euros, lo que representa un apalancamiento de 2,9 veces.

El acuerdo mantiene el vínculo entre ambas compañías porque Vodafone seguirá prestando determinados servicios a la 'nueva' Vodafone España, cuantificados por aquella en un total anual de 110 millones de euros, aunque el consejero delegado de Zegona ha matizado que "será algo menos". Ambas empresas han firmado un acuerdo de marca que permitirá a Zegona utilizar la marca Vodafone en España durante un máximo de 10 años después de su financiación. Además, se prevé que celebren otros acuerdos transitorios y a largo plazo para servicios que incluyen acceso a adquisiciones, IoT, itinerancia móvil y servicios de operador.

"La venta de Vodafone España es un paso clave para dimensionar nuestra cartera para el crecimiento y nos permitirá centrar nuestros recursos en mercados con estructuras sostenibles y suficiente escala local. Me gustaría agradecer a todo nuestro equipo en España por su dedicación a nuestros clientes y su incansable determinación para mejorar nuestro desempeño orgánico. Sin embargo, el mercado ha enfrentado desafíos con retornos estructuralmente bajos", ha explicado la consejera delegada de Vodafone, Margherita Della Valle. El valor de 5.000 millones de euros por la compañía equivale a un múltiplo de 5,3 veces el beneficio bruto de explotación (Ebitda).

Su homólogo en Zegona, Eamonn O’Hare, ha expuesto la "ilusión" por "volver al mercado español de las telecomunicaciones". "Esta adquisición financieramente atractiva marca nuestro tercer acuerdo en España después de exitosas reestructuraciones en Telecable y Euskaltel. Con nuestra estrategia claramente definida y nuestra trayectora comprobada, confiamos en que podemos crear un valor significativo para los accionistas", ha señalado el consejero delegado de Zegona, Eamonn O’Hare, en un comunicado.

'Modus operandi'

El fondo británico es un viejo conocido en España, adquirió en 2015 la operadora de cable asturiana Telecable por 640 millones de euros, compañía que posteriormente compraría Euskaltel en 2017 por 686 millones de euros. En Euskaltel, Zegona llegó a alcanzar una participación del 21,4%, convirtiéndose en el mayor accionista de una compañía de la que dejó de formar parte tras la compra por parte de MásMóvil en 2021. Y ese es el 'modus operandi' de Zegona: adquirir negocios en el sector de telecomunicaciones, medios y tecnología con el objetivo de "comprar, reparar y vender" para ofrecer "retornos atractivos a los accionistas", según relata el propio fondo británico en su página web.

Según el comunicado, el objetivo de Zegona a partir de ahora será "transformar el negocio" para ofrecer un "servicio excepcional a los clientes y rentabilidades atractivas para los inversores" a través de una "gestión altamente experimentada" con el nombramiento de José Miguel García como consejero delegado, la mejora de la eficiencia "reduciendo la complejidad e impulsando la productividad" y estabilizar los ingresos "con nuevas iniciativas comerciales"

Competencia del mercado

La enorme presión competitiva del mercado de las telecomunicaciones en España ha llevado a Vodafone a perder muchos clientes en favor de los operadores de bajo coste. La filial española registros unos ingresos por servicios (los directamente relacionados con los servicios de telecomunicaciones y que miden mejor la evolución del negocio) de 3.514 millones en su año fiscal, un 5,4% menos que en el ejercicio anterior. Esto llevó a la compañía a considerar su venta.

Fue en mayo de este año cuando la nueva consejera delegada del grupo, Margherita Della Valle, admitía que revisaría la estrategia de la filial española y dejaba la puerta abierta a una posible desinversión. Della Valle añadió entonces que cualquier decisión adoptada tendrían como objetivo "maximizar el valor para el accionista". Vodafone había sonado como para unirse con MásMóvil antes del anuncio del cuarto operador español de fusionarse con Orange.