La jubilación de los ‘boomers’ incrementa un 12% la cifra de pensionistas coruñeses

La provincia cuenta con 192.000 prestaciones de jubilación, lo que supone 20.400 más que hace una década y 1.500 más que hace un año | Y la cifra va a seguir creciendo

Un jubilado pasea por los soportales de María Pita. |   // CARLOS PARDELLAS

Un jubilado pasea por los soportales de María Pita. | // CARLOS PARDELLAS / Manolo Rodríguez

Manolo Rodríguez

Manolo Rodríguez

Desde hace décadas, el pago de las pensiones siempre ha estado en el debate político y económico. Y el año pasado entró una nueva variable en la discusión que altera aún más la problemática: en 2023 cumplieron 65 años los primeros niños del llamado baby boom. Y por eso, el número de prestaciones por jubilación pagadas a través de las arcas públicas, debido también al aumento de la esperanza de vida, empieza a dispararse. Según los últimos datos del Ministerio de la Seguridad Social, la provincia de A Coruña cuenta con 305.733 beneficiarios de pensiones contributivas, de los que 192.203 son de jubilación. Esta última cifra supone un incremento del 12% respecto a la década pasada o lo que es lo mismo, 20.469 personas más que hace diez años. Respecto a 2022, el número de jubilados coruñeses (cuya pensión media se sitúa en 1.234 euros mensuales, frente a la media estatal de 1.377) repunta casi un 1%. Dicho de otro modo, 1.534 más en solo doce meses.

La generación de los boomers la constituyen aquellos nacidos entre 1957 y 1977, cuando en España nacieron casi 14 millones de niños. En 2023 comenzó la edad del retiro laboral de aquellos que cumplan con los requisitos actuales para hacerlo a los 65 años y por eso las listas de la Seguridad Social engordan su número de beneficiarios de prestaciones sociales. Este ente estatal destinó en noviembre la cifra récord de 328 millones de euros al pago de la nómina ordinaria de pensiones contributivas a los coruñeses, un 10% más que hace un año, según el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.

La provincia de A Coruña alcanza de este modo la cifra de jubilados más alta de su historia. Mientras tanto, se dispara también el gasto en otras prestaciones, como las pensiones de viudedad, a las que se destinaron 56,8 millones de euros, un 9,4% más que hace un año, mientras que a las de incapacidad permanente se dedicaron 25,3 (+11,4%). Por su parte, las de orfandad conllevaron un importe de 4,4 (+10%), y a favor de familiares totalizó 1,5 millones (+7%).

Según el Ministerio de la Seguridad Social, la nómina mensual ordinaria de las pensiones vuelve a marcar un nuevo récord debido a la reforma de las pensiones, ya que éstas subieron en 2023 un 8,5% como consecuencia de la inflación media del periodo diciembre de 2021-noviembre de 2022. Pese a todo, el departamento que dirige José Luis Escrivá estima que el gasto en pensiones es “sostenible” porque se situó en el 11,6% del PIB en los últimos doce meses, por debajo de la de 2022 (11,7% del PIB), 2021 (12,1% del PIB) y 2020 (12,4% del PIB), año condicionado por el impacto de la pandemia de coronavirus sobre la generación de renta. El incremento del gasto en las pensiones en España ha llevado a la economista jefe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), Clare Lombardelli, a asegurar que la edad de jubilación debería aumentar en línea con la esperanza de vida, una decisión “difícil”, pero necesaria si se quiere garantizar la sostenibilidad del sistema. Lombardelli presentó recientemente el Estudio económico de España 2023, elaborado por la OCDE, que considera que el período de referencia para el cálculo de los derechos de pensión debería ampliarse, probablemente hasta al menos 40 años, para garantizar la sostenibilidad financiera. El gobierno de coalición entre PSOE y Sumar se han se comprometido a seguir actualizando las pensiones con el IPC, a continuar aumentando las pensiones mínimas y no contributivas por encima de la revalorización de las pensiones contributivas, hasta alcanzar la media europea, así como a seguir progresando en la eliminación de la brecha de género de las pensiones.

A finales del pasado mes de octubre, el Consejo de Ministros aprobó un préstamo de 10.003 millones para la Seguridad Social con el que se abonó las pagas extras de Navidad de los pensionistas. La concesión del crédito ya estaba contemplada en los Presupuestos Generales del Estado de 2023 y viene siendo una práctica habitual en la última década para cuadrar las cuentas del sistema público de pensiones, ante el progresivo aumento del número de pensionistas y del importe de las mismas.

La tesorería de la Seguridad Social lleva desde 2012 necesitando de refuerzos extras para poder cumplir con todas sus obligaciones en tiempo y forma. Entre 2012, ya con Mariano Rajoy en la presidencia del Gobierno, y 2019, con Pedro Sánchez en Moncloa, el Estado tuvo que ir sacando dinero de la conocida como hucha de las pensiones para pagar las nóminas, ya que a final de año salía de la caja más dinero del que entraba.

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