Todo el crecimiento del empleo en Galicia en construcción y comercio es de extranjeros

Las afiliaciones de trabajadores foráneos baten récord en la comunidad con casi 61.000 tras un alza del 14,5% en un año u La actividad con más personas de otros países es la hostelería

Julio Pérez

El mercado laboral camina de la mano de la pirámide demográfica. Cada vez hay más trabajadores mayores porque también en la sociedad en general se está viviendo un progresivo envejecimiento por la crisis de la natalidad y, precisamente porque falta relevo generacional y la economía tira con fuerza, repunta con fuerza la llegada de foráneos a trabajar a España después de la considerable mengua del colectivo durante la recesión financiera. “La evolución del peso de la población extranjera en el período 2014 a 2023 marca un descenso que se inicia en la variación 2015/2014 y que se mantiene a la baja hasta 2017, año en el que el colectivo representa el 9,50 % del conjunto de la población”, contextualiza el Servicio Público de Empleo Estatal (Sepe) en su nuevo informe sobre los ocupados procedentes de otros países. En 2018 se inicia la “recuperación continuada en el tiempo de las cifras que llega a 2023 con un porcentaje de extranjeros, sobre la población total, del 12,66 %, porcentaje que representa el valor más elevado de toda la serie temporal”. Exactamente lo mismo que en las afiliaciones a la Seguridad Social, que en marzo batieron un récord con 2.785.473 extranjeros.

De la distancia con la que Galicia vivió el boom de foráneos previo al estallido de la burbuja inmobiliaria no hay ahora rastro. Lleva dos años siendo una de las autonomías con mayor incremento de trabajadores de otra nacionalidad. En marzo estaban dados de alta 60.584 tras un incremento del 14,5% (7.700 más) respecto al mismo mes del pasado 2023 —la segunda mayor subida del Estado solo por detrás de Asturias: 14,7%— y un máximo histórico, según el balance publicado ayer por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.

Sin ellos, no habría expansión posible del empleo en la comunidad y varios de los sectores tractores de la economía y muy intensivos en contratación estarían ahora mismo en números rojos. Empezando por la construcción. Hay casi 6.200 migrantes de alta laboral en Galicia en el ladrillo. En los últimos doce meses aumentaron en 996. El incremento total de las afiliaciones en el sector rondó las 440. Es decir, sin los extranjeros fichados la construcción tendría unos 550 trabajadores menos que en marzo del ejercicio anterior. Igual sucede en el comercio y la reparación de vehículos, donde se crearon 877 puestos gracias a que entraron más de 900 foráneos en él.

La actividad con más extranjeros afiliados a la Seguridad Social en Galicia es la hostelería. Superan los 11.500 después de un alza de cerca de 2.000 respecto a los que había hace un año. Seis de cada diez nuevos trabajadores en bares, restaurantes y hoteles en la comunidad procedían de otro país. En la industria manufacturera concentran el 43% de toda la ocupación generada: 737 efectivos, hasta alcanzar un total de 5.600 cotizantes. Hay 704 trabajadores extranjeros más que en marzo de 2023 en actividades administrativas y auxiliares; 506 en transporte y almacenamiento; 531 en actividades sanitarias y servicios sociales; 251 en actividades profesionales, científicas y técnicas; 233 en el grupo de otros servicios; y 120 en educación. Portugal lidera el ranking de países de origen de los trabajadores extranjeros en Galicia con 9.135 afiliaciones de media a lo largo de marzo. Le siguen Venezuela (8.532), Colombia (5.756), Brasil (3.299), Marruecos (3.216), Perú (3.152), Italia (2.740), Cuba (1.979), Senegal (1.727), China (1.699), Argentina (1.545) y República Dominicana (1.389). Proporcionalmente, los chinos destacan en el régimen especial de autónomos (1.129); en el sistema especial de agrario el grupo mayoritario es el de marroquíes (600); y en sistema especial del hogar sobresalen los colombianos (760); y en el del Mar los senegaleses (432).

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