Una parte de Podemos Galicia cuestiona las primarias que el diputado coruñés Antón Gómez-Reino ganó a Carolina Bescansa por el liderazgo interno. Uno de los miembros de la lista de esta última y exedil con Ada Colau en Barcelona, Raimundo Viejo, reclamó ayer una auditoría ante lo que considera "indicios de fraude" en el proceso.

Viejo se hizo eco de la supuesta decisión de la Comisión de Garantías de la organización en Galicia de solicitar tres estudios sobre las primarias para "poner fin a las muchas preguntas, dudas, rumores y sospechas que muchos compañeros están mostrando [...] y que ponen en duda la legitimidad de todos los órganos de Podemos Galicia". Sin embargo, la dirección del partido negó cualquier validez a un texto que no considera resolución de la citada comisión, sino que atribuye a dos de sus cuatro miembros. Además, añade que se pretendió aprobar con solo tres asistentes a una reunión y mediante voto telemático, cuestiones que vulneran sus estatutos. Fuentes de la cúpula de Gómez-Reino esgrimen incluso los dos cargos -el otro votó en contra- que apoyaron ese documento y lo tramitaron como oficial han sido apercibidos de sanción por parte de la Secretaría de Organización estatal.

"No se replantea la legalidad de las primarias, no hay denuncia alguna de irregularidades y no se han encargado tres auditorías", sostienen desde la dirección gallega, que matiza que la contratación de la empresa que gestionó la votación telemática corresponde a Madrid, cuya limpieza fue validada, añaden, por otra firma.

Transparencia

El ruido, sin embargo, enturbia aún más la imagen de la transparencia interna, tras las denuncias de pucherazo en las primarias de En Marea vertidas por Podemos contra Villares y de accesos ilegales al censo de inscritos de críticos alegada por la dirección de este último.