Ni la plaga de la avispa velutina, ni las malas condiciones meteorológicas ni la competencia de la miel falsa impiden que la apicultura en Galicia pare de crecer. Tanto el número de colmenas como el censo de explotaciones alcanzó su techo histórico durante el pasado año. Y el sector tiene futuro, porque la edad media de los apicultores es de 41,1 años, la segunda cifra más baja después de la de Asturias. La comunidad gallega es, además, la quinta productora de miel del país, con casi 3.000 kilos, de los que un 10% están bajo la etiqueta de Mel de Galicia.
►Récord de explotaciones y de colmenas. En marzo del año pasado, últimos datos disponibles, había en Galicia 4.663 explotaciones —la cifra más alta de la historia— dedicadas a la actividad apícola, lo que supone una subida del 24,8% respecto a 2010 (3.460), y un 6,5% más que en abril de 2019.
El censo de colmenas no para de crecer hasta lograr también la cifra más alta de la historia: 197.577. En la última década, el crecimiento ha sido del 77%. Es la segunda mayor subida de todas las comunidades, tras Extremadura según los datos del último informe de este sector publicado por el Ministerio de Agricultura.
La causa de este incremento hay que buscarla en la creciente demanda de miel, sobre todo la que está amparada bajo la Indicación Geográfica Protegida (IGP) Mel de Galicia. El gran crecimiento se ha producido desde 2015. En estos cinco años, el número de colmenas se ha disparado un 66%, seis veces más que a nivel nacional.
►Apicultores muy jóvenes. El sector de la apicultura en Galicia tiene en futuro porque la edad media de los titulares de las explotaciones es de 41,1 años, la segunda cifra más baja tras los 40,2 de Asturias. Esto implica que es uno de los sectores menos envejecidos, ya que se sitúa por debajo de la media de los sectores ganaderos y aún más alejado de la media del conjunto de los sectores agrarios. A nivel nacional, la edad media es de 47,2 años, seis más que en Galicia.
►La gran mayoría son personas físicas. Del total de titulares, el 89,6% son personas físicas. En España sube hasta el 96%, aunque este porcentaje varía entre las distintas comunidades, ya que llega a ser del 71% en Canarias.
►Tercera con más explotaciones. Galicia continúa en el podio de las comunidades con más explotaciones apícolas y solo la superan Castilla y León (5.950) y Andalucía (5.349). En cuanto al número de colmenas ocupa la sexta posición. Los tres primeros puestos son para Extremadura (662.000), Andalucía (595.000) y Castilla y León (449.000). Entre las tres suman más de la mitad de las que hay en España. Galicia posee el 7%.
►Apicultores no profesionales. En su mayoría, los apicultores gallegos son amateurs. El Ministerio de Agricultura los denomina hobbistas. Son pequeños apicultores que producen miel, sobre todo para el autoconsumo, y que no son profesionales. Para ser profesional, el ministerio establece que las explotaciones deben contar con más de 150 colmenas. En Galicia, solo el 8% de los apicultores son profesionales: 276 de las 4.663 explotaciones. España posee la tasa más alta de profesionales de la Unión Europea con el 17%.
►Cae la producción de miel en España. La producción de miel en España se situó en 32.000 toneladas en 2019, tras bajar 4.000 con respecto a 2018. Las 36.000 que se recogieron ese año es la cifra más elevada de los últimos 20 ejercicios. En Galicia ronda los 3.000 kilos.
La mitad de los profesionales recibe ayudas
En Galicia existen 4.663 explotaciones apícolas. De ellas, solo 217 (el 8%) son profesionales, es decir, tienen más de 150 colmenas. Y de estas, la mitad recibe ayudas de la Unión Europea. A nivel nacional, de las 5.240 explotaciones profesionales cuentan con subvenciones el 68,1%, es decir, 3.570. Este porcentaje está por encima de la media de los sectores ganaderos (50,6%), pero por debajo de la media agrícola (76,5%). La comunidad con mayor número de explotaciones con ayudas es Andalucía (1.113 que representa el 74% de sus explotaciones), seguida por Extremadura (869-87%) y Castilla y León (486-78%). Destacan las comunidades de Asturias, Cantabria, País Vasco, La Rioja y Murcia con un mayor porcentaje de explotaciones sin ayudas. El importe medio de las ayudas por explotación en Galicia es de 5.000 euros, menos de la mitad que a nivel nacional (12.936). En Castilla-La Mancha y Canarias se encuentran los mayores importes medios (97.257 y 22.400 euros, respectivamente) frente a Cantabria, La Rioja y Comunidad Valenciana con los menores (alrededor de 2.000).
Unos 13.000 euros al año de beneficio
¿Una explotación apícola es rentable? El Ministerio de Agricultura ha realizado un estudio económico de una explotación apícola profesional de 500 colmenas (con venta de miel al por mayor). Según el ministerio, la inversión media necesaria para llevar a cabo la actividad se cifra en torno a 175.000 euros. Los gastos fijos anuales medios se estiman en cerca de 44.800 euros, teniendo en cuenta los gastos fijos (costes de producción y envasado) y variables (fundamentalmente los tratamientos sanitarios). El estudio estima que los ingresos totales medios serán aproximadamente de 58.000 euros, por lo que el rendimiento neto medio de la explotación con ayudas ronda los 13.000 euros anuales. El importe medio de las ayudas ascendería a 8.800 euros (teniendo en cuenta las de comercialización, polinización, diversidad…). El 65% de los ingresos procedería directamente de la venta de miel al por mayor, el 20% de la comercialización de otros productos como enjambres y ceras y el 15% provendría del importe de las ayudas percibidas. Las explotaciones de la comunidad gallega cuyo titular es una persona jurídica cuentan con una mayor dimensión económica, con una media de 325.000 euros/explotación, frente a los 55.000 euros/explotación en aquellas cuya titularidad es una persona física.
