No solo desde la oposición se ha dicho no a la propuesta del Gobierno de Sánchez de implantar peajes en las autovías, sino que en las propias filas socialistas tampoco apoyan la medida remitida a la UE con el objetivo de financiar la conservación de carreteras. En la misma semana que el PSdeG se sumó a PP y BNG en el Parlamento para rechazar ese cobro, la Diputación de A Coruña también rechazó que los usuarios tengan que pagar por recorrer las vías de alta capacidad del país.
El pleno de la Diputación de A Coruña, presidida por el socialista Valentín González Formoso, votó ayer por unanimidad a favor de la moción presentada por Marea Atlántica para continuar con el libre uso de las autovías y rechazar un sistema de pago por el uso de estas infraestructuras.
En el debate, todos los grupos protestaron contra el pago y el PSdeG a través de su portavoz, Bernardo Fernández, destacó que la medida ya no estaba sobre la mesa del Gobierno, que había asegurado a través del ministro José Luis Ábalos la continuidad de la gratuidad. Fernández también solicitó a la Xunta suprimir el pago de peajes que se siguen manteniendo en las autopistas gallegas como la que une A Coruña y Carballo.
Por otra parte, el BNG intensificará su campaña de rechazo a los peajes en las autovías con iniciativas en el Congreso pero también en los ayuntamientos.
Néstor Rego reiteró ayer que el rechazo al cobro en las vías de alta capacidad concita un “amplio consenso” en la idea de que sería “muy negativa” para Galicia. “Ocupamos una posición periférica desde el punto de vista geográfico en el Estado y en Europa y, por lo tanto, la necesidad de las vías terrestres sin alternativas es mucho mayor que en otros territorios”, advirtió el portavoz del BNG en el Congreso. Además, advirtió de que esa discriminación con Galicia se pone de manifiesto al no contar con “alternativas de transporte público por carretera, de transporte ferroviario ni de mercancías” por lo que esta medida resulta “antiecológica, antisocial y antigallega” porque expulsaría a las clases populares de las autovías, “ya que los ricos siempre van a poder pagarlas”.
