Se cumple un año de la Lei de recuperación da Terra Agraria y, en este periodo de tiempo, se han movilizado 5.054 hectáreas de terreno, según el balance de la Consellería de Medio Rural. La mayoría, unas 4.531, se corresponden con la puesta en marcha de polígonos agroforestales y hay otras 523 que se reactivaron gracias a las aldeas modelo. Entre ambos instrumentos se han movilizado unas 28.000 parcelas propiedad de 7.000 gallegos.
De los 15 polígonos agroforestales de iniciativa pública, 10 están ya iniciados y otros cinco están en fase de actuaciones previas, según informó ayer el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, tras la reunión semanal del Ejecutivo gallego.
Los más adelantados son los de Oímbra (con 64 hectáreas), que se destinará a ganadería en extensivo y plantación de árboles frutales, y el de Cualedro (con cerca de 22 hectáreas), donde la previsión es dedicarlo a ganado y a cultivos complementarios.
Además, Rueda destacó que estos polígonos agroforestales están suscitando interés también entre la iniciativa privada. De hecho, la Consellería de Medio Rural recibió 34 solicitudes para movilizar 1.300 hectáreas.
En cuanto a las aldeas modelo, actualmente hay declaradas un total de 19, pero se está trabajando en la creación de otras nueve.
Además de este balance, el Consello de la Xunta lanzó dos líneas de ayudas a pymes y autónomos por 7 millones de euros para apoyar la digitalización y la economía circular.
Desempleados
En materia de empleo el Gobierno gallego destinará 8,5 millones para apoyar la contratación de más de 500 personas desempleadas a través de convenios con entidades sin ánimo de lucro.
Otra orden de ayudas, por una cuantía de 300.000 euros, está dirigida a los concellos para que realicen auditorías de las redes de abastecimiento. Tal y como explicó el presidente de la Xunta, el objetivo es reducir el nivel de fugas de agua a menos de la mitad. Ahora mismo, según los datos de Augas de Galicia, las pérdidas en las redes municipales alcanzan el 41%.
La Lei de Medidas de Garantías de Abastecemento contemplaba la obligación de los ayuntamientos de llevar a cabo auditorías para cuantificar estas pérdidas. La Xunta convoca ahora la primera orden de subvenciones para ayudar a los concellos con menos recursos. El objetivo es que se beneficien 45 corporaciones.
Por otro lado, la Xunta va a poner en marcha un proyecto de bibliotecas móviles para dar servicio a las zonas rurales. Consistirá en dos furgonetas que se desplazarán dos veces al mes a cada uno de los concellos y que dispondrán de una colección de 500 libros, además de películas, música y juegos.
En materia tecnológica se aprobaron dos inversiones: por un lado, se destinarán 13,9 millones para adquirir uno de los primeros ordenadores cuánticos del sur de Europa y se inyectarán otros 25 millones para construir un nuevo centro de procesamiento de datos de la Xunta.
Por último, el Consello de la Xunta dio el visto bueno a la creación de tres facultades en la Universidade de Vigo: la de Diseño, la de Dirección y Gestión Pública y la de Relaciones Internacionales para el campus de Ourense.
