La Guardia Civil detectó el lunes a un conductor que circulaba a 213 kilómetros por hora en la autovía A-52, a su paso por el municipio ourensano de Allariz, en un tramo limitado a 120 km/h. Según detalló el Instituto Armado, se trataba de un varón de 47 años de nacionalidad francesa que se dirigía a la costa de vacaciones. Desde enero, la Guardia Civil ha detectado en las carreteras ourensanas otros cinco excesos de velocidad delictivos.