Un muerto y tres heridos en una colisión de un camión, una furgoneta y un coche patrulla en Ourense

El siniestro ocurrió poco después del mediodía en la N-525, en San Cibrao EEl fallecido, un vecino de A Estrada de 58 años

Agentes en el lugar de la colisión ocurrida ayer en la N-525, a su paso por San Cibrao. |   // IÑAKI OSORIO

Agentes en el lugar de la colisión ocurrida ayer en la N-525, a su paso por San Cibrao. | // IÑAKI OSORIO / Redacción / E. Filgueira

Redacción / E. Filgueira

Un muerto y tres heridos. Es el balance que dejó una colisión múltiple ocurrida ayer en Ourense. En el accidente, que se produjo poco después del mediodía, se vieron implicados un camión, una furgoneta y un coche patrulla de la Guardia Civil en el que viajaban dos agentes. El siniestro ocurrió concretamente en el kilómetro 228 de la OU-525 a su paso por el concello de San Cibrao das Viñas.

El conductor de la furgoneta, Manuel G. S.,, 58 años y vecino de la localidad pontevedresa de A Estrada, tuvo que ser excarcelado, pero nada pudo hacerse por su vida. Los conductores de los otros dos vehículos también necesitaron de la intervención de los bomberos para ser rescatados del camión y el turismo. Ambos fueron trasladados en estado grave. El tercer herido, de carácter leve, viajaba como copiloto en uno de los vehículos.

Fue uno de los implicados el que alertó del suceso, indicando que una persona necesitaba “ayuda urgente”. Hasta el lugar se trasladó urgencias médicas, también se movilizó el helicóptero medicalizado, bomberos de San Cibrao y Ourense, Protección Civil de San Cibrao, Guardia Civil y GES de Pereira.

La noticia del fallecimiento de Manuel G. S. corrió al mediodía de ayer por A Estrada causando una gran consternación. Era natural del limítrofe concello de Cuntis, pero terminó asentándose desde muy joven en A Estrada, donde se casó y creó una familia. Su entorno destaca el carácter siempre afable y, especialmente, su pasión por el fútbol.

Manolo era conocido por su larga relación con el Club Deportivo Estradense, equipo al que llegó para vivir una de sus épocas más gloriosas. Militaba en el Atlético de Cuntis y daba clases de fútbol a los niños del colegio de A Anllada cuando directivos del equipo rojillo fueron a ficharlo. Con el Estradense, Manolo vivió un ascenso a Preferente y, con un año de por medio, otro ascenso a Tercera División. Era la primera vez que el equipo rojillo llegaba a esa categoría, una gesta en la que él fue parte importante como guardameta titular.

Tras una larga carrera en el estadio de A Baiuca, el meta dejó el equipo, aunque eso no lo separó del Club Deportivo Estradense. Durante unos veinte años, Manolo siguió defendiendo la portería del club rojillo, aunque ahora con el equipo de veteranos. Allí siguió jugando con algunos de sus compañeros del primer equipo pero también fue conociendo a otros jugadores más jóvenes que se iban sumando al equipo. De esta manera se convirtió en un hombre muy conocido y respetado dentro de la entidad.