La primera cosecha cervecera de A Limia concluye con 152.000 kilos recogidos

Hijos de Rivera inició en 2009 un plan para usar malta de cebada “100% gallega”

Cosechadora en A Limia.   | // HIJOS DE RIVERA

Cosechadora en A Limia. | // HIJOS DE RIVERA / redacción

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La comarca ourensana de A Limia ha cosechado 152.000 kilogramos de cebada cervecera, lo que le permite situarse con un rendimiento “muy por encima” de otras regiones como Castilla y León o Aragón, especialmente afectadas por la sequía, según datos recogidos por la Corporación Hijos de Rivera.

El proyecto impulsado por la empresa Cosecha de Galicia, perteneciente a la corporación gallega, empezó en 2009 en colaboración con la empresa Sementares y de agricultores de la zona de A Limia. El objetivo final, ha explicado la firma, es “introducir” este cultivo en Galicia y poder elaborar alguna de las cervezas de la compañía con malta de cebada de origen “cien por cien gallego”.

La primera cosecha es fruto, añade, de años de investigación y seguimiento de los cultivos por parte del equipo cervecero que ha culminado este mes con la primera cosecha en las cinco parcelas cultivadas, con un total de 32 hectáreas.

Utilizaron, para ello, la variedad de cebada cervecera RGT Planet, que está dentro del listado de variedades preferidas por Malteros de España para los años 2022 al 2024. A la vista de los resultados, desde Hijos de Rivera sostienen que el balance “no puede ser más positivo”, ya que permite confirmar el “potencial enorme” de esta zona para este cultivo. “

Defiende que el cultivo de cebada cervecera en Galicia tiene un futuro muy prometedor por las condiciones óptimas que se dan en la zona de la laguna de Antela”, ratifica la corporación con sede en A Coruña.

Añade la necesidad de mantener un contenido proteico en el grano de cebada dentro del rango adecuado para el proceso de elaboración de cerveza que debe estar entre 9 y 11 %, ya que un nivel más elevado no sería adecuado para su elaboración.

Para alcanzar este objetivo, la empresa ha seguido prácticas agronómicas y optimización de las técnicas nutricionales a fin de reducir el uso de fertilizantes con la consecuente mejora en el ámbito de la sostenibilidad del cultivo, evitando la contaminación de acuíferos y la eutrofización de aguas superficiales, ha concluido.