Educación blindará la propiedad intelectual de las patentes en Formación Profesional

La consellería abre el proceso para recibir aportaciones y elaborar el primer decreto de España sobre este tipo de explotación intelectual

Un alumno y su profesor en un centro de FP. |   // CARLOS PARDELLAS

Un alumno y su profesor en un centro de FP. | // CARLOS PARDELLAS

Daniel Domínguez

Las nuevas ideas que derivan en patentes e ingresos económicos le generaron unos 20 millones a las tres universidades gallegas. Aprovechar ese capital en la Formación Profesional (FP) constituye un objetivo estratégico por parte de la Consellería de Educación, que ayer abrió el proceso para recibir ideas y elaborar el primer decreto de España que regule la explotación económica de la propiedad intelectual por parte de los centros de FP.

La idea fue avanzada por el Alfonso Rueda el pasado 1 de febrero, pero fue ayer cuando el departamento dirigido por Román Rodríguez, abrió el proceso público para recibir aportaciones de cara a la elaboración del primer decreto sobre esta cuestión. Podrán proponerse ideas hasta el 12 de junio para blindar legalmente la explotación comercial de las ideas surgidas de la FP. El objetivo es “garantizar un marco jurídico que proteja las creaciones e invenciones surgidas en el ámbito de la FP”, alega Educación en el proceso de exposición pública. “El decreto tiene por objeto regular la titularidad, protección y explotación de los derechos de propiedad intelectual e industrial surgidos en el ámbito de la Formación Profesional de Galicia, siendo de aplicación a los resultados de investigación e innovación aplicada generados en el ámbito de FP en los centros educativos dependientes de la consellería con competencias en materia de FP, así como en el Centro Gallego de Innovación de la Formación Profesional”, añade.

La FP vive desde hace años un gran auge, tanto por la diversificación de las titulaciones ofrecidas, como por el porcentaje de integración laboral que muestran.

La demanda es tan elevada que el año pasado, la lista de espera para cursar un ciclo de este tipo sumaba 8.700 solicitudes a unos días del inicio del curso, con mayor interés de los grados superiores, pues estas demandas duplicaban las de quienes integraban la cola para un ciclo medio. Sanidad y educación infantil, entre las titulaciones más requeridas.

Durante los dos últimos cursos, el alumnado inscrito en FP registró un ligero descenso, pero la demanda ha crecido un 16% durante la última década. Ante esta situación, la Xunta considera necesario blindar la explotación económica de las ideas, patentes, modelos de utilidad, diseño industrial marcas o programas informáticos, por ejemplo, surgidos de las aulas de FP de la comunidad.

Para blindar esos procesos, Educación fijará un sistema de cuatro pasos. Primero, los inventores comunicarán al Centro Galego de Innovación de FP los resultados de su idea, luego de evaluarán los resultados y este centro decidirá su procede proteger su patente. En tercer lugar, ese centro asumirá los costes de pedir la protección intelectual a nivel nacional o internacional y finalmente se promocionará para dar salida económica a su uso.

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