El pleno de la Diputación coruñesa aprobó ayer por unanimidad de todas las fuerzas políticas el proyecto de acondicionamiento y mejora de la seguridad vial de la carretera provincial DP-3104 a su paso por el núcleo de Liñares, en el entorno del aeropuerto, en Culleredo. El plazo de ejecución será de cuatro meses a partir del inicio de los trabajos.

Las obras, que cuentan con un presupuesto que ronda los 550.000 euros, supondrán la construcción de una senda peatonal de cerca de 1,8 kilómetros de longitud, que partirá de la iglesia antigua de Tarrío y acabará en la intersección de la DP-3104 con la carretera Nacional 550 en Alvedro. A este montante hay que sumar los 11.889 euros de las expropiaciones de terrenos necesarios para acometer la obra, según detalla el Gobierno provincial. Tendrá un ancho de 1,80 metros, excepto en varios puntos donde la calzada se estrecha, que tendrá que ser de 1,50 metros.

Según explicó el alcalde cullerdense y también diputado provincial, José Ramón Rioboo, indicó que la Diputación “atiende con la puesta en marcha de este proyecto una reivindicación del Concello de Culleredo y de los vecinos de Liñares para mejorar la seguridad peatonal en un núcleo que, a pesar de contar con numerosas viviendas, carecía hasta ahora de un itinerario peatonal seguro”.

La senda, según asegura la Diputación coruñesa, tendrá dos tipologías diferenciadas. En la zona donde hay viviendas, a lo largo de un kilómetro, estará construido con adoquín prefabricado de hormigón sobre base zahorra, mortero y hormigón. En el resto de la obra se construirá con aglomerado asfáltico, a medio metro de la marca vial del borde actual de la carretera. En los cruces con otras calles será sustituido por pavimento de adoquín de piedra natural.

Durante la realización de las obras será necesario ejecutar algunos muretes y retranquear el eje de las carretera en dos tramos: en la zona de la parada de bus existente y en otro tramo en el que se desmontará un talud existente y se ejecutará un muro mampostería en la margen izquierda, ampliando un metro el ancho de carretera para conseguir un itinerario accesible en la senda, según explica la Diputación. En estos tramos se aprovechará para renovar todo el pavimento de la calzada. Finalmente, también se renovará el pavimento de la vía con una nueva capa de rodadura.

El Ejecutivo provincial también explica que se renovará la señalización vertical y horizontal de todo el tramo, instalando el balizamiento y protecciones necesarias.

El proyecto incluye asimismo la construcción de una red de recogida de pluviales, eliminando los actuales tramos de cuneta en tierra. Contará con pozos de registro y sumideros para la correcta evacuación de las aguas. También se repondrán algunos servicios afectados por las obras como determinados tramos de saneamiento y algunos postes de alumbrado.