Oleiros ya no tiene solo sus playas como atractivo. El ecoturismo, que no deja de crecer, tiene un enorme potencial en este municipio, especialmente el relacionado con la observación de las aves, sobre todo las acuáticas. En el Monumento Natural Costa de Dexo-Serantes existe una de las cuatro colonias de cormorán moñudo, o corvo mariño cristado, más importantes de España junto con las de Baleares, islas Cíes y Ons. Todo a lo largo de los acantilados existen nidos donde ahora mismo están eclosionando huevos o a punto de hacerlo, la descendencia de unas 130 parejas de esta ave marina. En todo el Golfo Ártabro, rías de A Coruña, Betanzos y Ares, se han censado 180.
Dentro de poco se realizará un nuevo censo de cormoranes y en verano se hará con las gaviotas y las pardelas, según explica Sergio París, coordinador de proyectos de Educación Ambiental y Espacios Naturales Protegidos en el Centro de Extensión Universitaria e Divulgación Ambiental (Ceida) del castillo de Santa Cruz. París, miembro de la Sociedade Galega de Ornitoloxía, también participa en estos censos. En año pasado se realizó por primera vez un anillamiento científico de esta ave.
“La población de cormorán en el Golfo Ártabro es mayor porque no se usan tanto artes de pesca como los trasmallos, donde quedan enredados, sino las nasas, que son más compatibles con su conservación”, subraya París.
Los que pudieron observar a estas parejas de cormoranes en sus nidos en los acantilados de Dexo fueron los participantes en el reciente Encuentro Nature Watch, una cita a nivel nacional que por primera vez se celebró en una localidad gallega, bajo el patrocinio de la Xunta. Más de 70 expertos realizaron ponencias sobre el turismo de observación de aves marinas en Galicia y entre ellos estuvo el reconocido escritor y experto en sonido de naturaleza Carlos de Hita, además del ornitólogo Antonio Sandoval.
Los participantes hicieron una visita guiada por el Monumento Natural, observaron, a una distancia prudencial y con prismáticos y catalejos, la que es la mayor colonia en tierra firme. También visitaron el Aula do Mar de los Faros de Mera y además pudieron ver el fondo marino alrededor de la isla de Santa Cruz con unas gafas de realidad virtual.
